La reina de la coca y Escobar en tumbas cercanas

Con la presencia de uno de sus dos hijos que le sobreviven, una hermana, nietos, sobrinos y vecinos del barrio Trinidad fue sepultada ayer en el cementerio Jardines Montesacro, Griselda Blanco , la llamada “Reina de la coca” de los años 70, según informa el sitio elcolombiano.com.

La que fuera una de las precursoras del tráfico de cocaína hacia EEUU había sido asesinada el pasado lunes en una carnicería de Belén Parque.

En medio de la interpretación de cinco temas por parte de un mariachi, entre ellos Mamá Vieja y Amigo, y el llanto de sus parientes, la “reina de la coca” fue enterrada en una tumba del bloque 15 del campo cementerio, diagonal 80 metros a las bóvedas de los que la consideraban su madrina: Pablo Emilio Escobar Gaviria y su primo Gustavo Gaviria .

Uno de los allegados a Griselda Blanco indicó que no entendían por qué la habían matado ya que ella, desde su llegada hace 8 años al país, llevaba una vida legal y muy entregada a su familia.

Agregó que no creía que la hayan asesinado por alguna deuda y que, tal vez, pudo haber sido una vieja venganza, dice el portal colombiano.

Manifestó que en el momento de su muerte había salido de su casa en El Poblado y se dirigió en su carro, un Mazda 6, a comprar la carne en el lugar donde siempre acostumbraba hacerlo.

A la ceremonia asistieron unas 100 personas, entre ellas varios jóvenes que le impidieron a los reporteros de varios medios de comunicación tomar fotos o hacer tomas para video.

Hacia las seis de la tarde culminó la ceremonia tras la interpretación del mariachi del tema Sin un adiós y una diana tocó un minuto de silencio.

En 2004, Griselda Blanco fue deportada a Colombia, por la justicia estadounidense, donde había purgado una condena de 18 años en una cárcel de Los Ángeles.