La Unión Europea avanzará con un impuesto a las ganancias extraordinarias de las petroleras

Según la funcionaria, que realizó el anuncio en Frankfurt ante de viajar a Kiev para reunirse con el presidente ucranianio Volodimir Zelensky, el gravamen se traducirá en una recaudación de más de € 140.000 millones. “La propuesta permitirá a los Estados miembros amortiguar el golpe de la crisis”, dijo von der Leyen ante el Parlamento Europeo.

Puntualmente, la CE planea poner un tope al dinero que reciben las empresas generadoras de eléctrica, en especial a las que trabajan con fuentes renovables, así como exigir una "contribución solidaria" a las petroleras, que se han beneficiado de los desorbitados precios de la energía desde el inicio de la guerra en Ucrania.

"El mercado de la electricidad se basa en principios obsoletos que no están a la altura de las circunstancias", dijo la titular de la CE. La funcionaria argumentó que “aunque en una economía social de mercado los beneficios son buenos, es equivocado tener ganancias extraordinarias beneficiándose de la guerra”.

Von der Leyen añadió que en las actuales circunstancias “los beneficios deben ser repartidos y canalizados a quienes más lo necesitan". Ahora, la iniciativa será examinada por los ministros europeos de Energía, que se volverán a reunir el 30 de septiembre, en el marco de un debate que genera divisiones entre los países del bloque por sus muy variadas situaciones.

La idea central pasa por desvincular los precios de la electricidad de la influencia dominante del gas. “Una reforma completa y profunda debe ir más allá de la crisis inmediata. El diseño actual del mercado de la electricidad ya no hace justicia a los consumidores, que deberían aprovechar los beneficios de la energía renovable de bajo costo", argumentó Der Leyen.

Los precios del gas y la energía en Europa se han disparado este año desde que Rusia recortó las exportaciones de combustibles como represalia por las sanciones occidentales. Según el Banco Central Europeo, esos valores constituyen una "fuerza impulsora dominante de la inflación" en la zona euro.

"Los países de la Unión Europea han invertido miles de millones de euros para ayudar a los hogares vulnerables, pero sabemos que no será suficiente", dijo von der Leyen. Sin embargo, hasta el momento, no ha habido una política unificada. Francia, por caso, anunció una extensión hasta 2023 de los topes a los precios de la energía; mientras que Dinamarca implementó sus propios límites temporales.

En Alemania, Uniper, el mayor importador de gas ruso, insinuó que el gobierno podría adquirir una participación mayoritaria en la empresa para ayudarla a enfrentar la crisis, al tiempo que varios especialistas advirtieron que la implementación de precios máximos podría llevar a muchas generadoras y distribuidoras a una situación de insolvencia.

El plan de la UE, no obstante, no incluye la idea propiciada por Estados Unidos de limitar los precios que se pagan por el gas y el petróleo rusos, decisión que de implementarse, según advirtió Moscú, podría derivar en un corte total de los suministros, medida que también divide aguas en el seno del bloque.

Hoy, el precio de referencia del gas en Europa se ubica en unos € 208 por megavatio/hora, muy por debajo del récord de agosto de € 343 euros, pero un 200% por encima del valor que exhibía en 2021. En este contexto, y ante un posible corte total por parte de Rusia, la UE se fijó el objetivo de llenar en un 80% sus instalaciones de almacenamiento para noviembre.

"Meses de disputas geopolíticas han dejado al mercado europeo del gas azotado, con precios volátiles derivados de la falta de suministro, la posible intervención del mercado y una mayor incertidumbre", dijo Zongqiang Luo, analista de Rystad, en declaraciones a la agencia AFP.

La crisis, que afecta a millones de hogares, también impacta en las empresas, que a menudo venden energía por anticipado y deben ofrecer garantías que se activan en el caso que la firma incurra en un incumplimiento. A medida que el precio del gas se dispara, también sube el costo de las garantías.

Como parte del amplio paquete de medidas anunciado por la CE, von der Leyen precisó que la UE establecerá arreglos temporales para ayudar a las firmas. "Trabajaremos con los reguladores para aliviar esos problemas modificando las reglas sobre garantías y tomando medidas para limitar la volatilidad de los precios intradía", prometió la funcionaria.