Existen dos francos CFA, uno para África Central y otro para África Occidental, pero ambos están a la par y atados al euro.

Mundo > MONEDAS

Las excolonias francesas de África buscan salir del corsé monetario del Franco CFA

Los ministros de Economía de varios países africanos intentan planificar una futura unión económica y monetaria
Tiempo de lectura: -'
15 de febrero de 2024 a las 05:00

En la actualidad, ocho Estados de África Central y Occidental utilizan el franco CFA, sin embargo, en las redes sociales ya circulan imágenes de los billetes que los países podrían utilizar para abandonar su divisa.

El franco CFA (oficialmente: Franco de la comunidad financiera africana) es el nombre de dos monedas: el franco CFA de África Occidental, utilizado en ocho países de África Occidental, y el franco CFA de África Central, utilizado en seis países de África Central. Aunque separadas, las dos monedas del franco CFA siempre estuvieron a la par, son efectivamente intercambiables y están atadas a la cotización del euro.

Expertos en el tema hablaron sobre las posibles consecuencias de adoptar su propia moneda en lugar del franco.

Para estos países, hoy, adoptar el franco tiene el efecto de crear déficits de exportación y estabilidad, lo que evita procesos inflacionarios, explicó Rodrigo Leite, profesor de finanzas en el Instituto de Posgrado en Administración de Empresas (Coppead) de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ)

"Como cualquier moneda en que tiene estabilidad inflacionaria, se reduce la posibilidad de expansión monetaria por parte del gobierno. Así que se cambia estabilidad por una reducción de la soberanía monetaria", afirma.

Para Policarpo Gomes Caomique, máster en gobernanza e integración regional por la Universidad Panafricana (PAU), la decisión política fue acertada por varias razones:

"En primer lugar, esta decisión explota el descontento de toda una generación de jóvenes africanos que se oponen a lo que consideran el servilismo de los Estados africanos a Occidente, especialmente a Francia. En segundo lugar, es importante porque cuestiona la hegemonía francesa en África Occidental y podría obligar a Francia a reorientar su lógica de cooperación y de la relación de Francia y África", señala.

En el plano económico, el investigador considera que es demasiado pronto para saber si una moneda única tendrá éxito. Afirma que hay varios factores que afectan al valor de una moneda: los tipos de interés, la inflación, la deuda, la estabilidad política, la empleabilidad, los resultados económicos, etc. Añade que si se fijan en los tres países en cuestión, su marco político y económico es deficiente.

África subsahariana, especialmente el Sahel, fue una región propensa a los conflictos étnicos, religiosos y políticos en las últimas décadas. En años recientes, Mali, Burkina Faso y Níger sufrieron bruscos cambios de Gobierno por la inseguridad provocada por grupos terroristas. También son naciones con conflictos internos.

Caomique también subraya que el terrorismo y el fundamentalismo religioso son una realidad en estos tres países.

"Y tampoco tienen salida al mar y limitan con países de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental, Cedeao. Los tres países tienen altas tasas de desempleo y sus mayores socios comerciales, por ejemplo, principalmente en términos de exportaciones, son los países de la subregión, la mayoría de los cuales también forman parte de la Cedeao, lo que dificulta la aplicación de la idea de crear una moneda", expresa.

A diferencia de los antiguos movimientos independentistas de los años 50 a 80, la multipolaridad ofrece a estos movimientos soberanistas alternativas políticas en el escenario global actual.

En septiembre de 2023, los gobiernos de Burkina Faso, Mali y Níger crearon la Alianza de los Estados del Sahel (AES). Mali retiró el francés de su estatus de lengua oficial. El 28 de enero de este año, los países anunciaron su retirada conjunta de la Cedeao.

Sin embargo, si estos tres países consiguen crear y mantener una moneda estable, sin duda atraerán a otros y "movilizarán esta ola de descolonización monetaria e independencia financiera en el contexto de África Occidental", comenta el experto.

Las ventajas de una moneda propia

Francia controla actualmente las reservas y la política cambiaria y monetaria de los países que utilizan el franco. Una moneda propia daría autonomía a estos países.

"Podrán tener mayor autonomía a la hora de negociar con los socios internacionales, por ejemplo. Podrán, entre ellos, decidir cuánto se va a emitir, cuál es la meta de inflación, porque la moneda propia del país potencia el efecto del desarrollo, porque entonces el país tiene la posibilidad de tener su propia política fiscal, dadas sus especificidades, idiosincrasias y visiones", expresa Rogrigo Leite.

El experto afirma que la creación de un entorno de estabilidad política permitirá que los proyectos de desarrollo que se pongan en marcha surtan el efecto deseado y mantendrá la seguridad jurídica y una corriente más fluida de transacciones comerciales.

Una posible unión de países que converjan en una moneda única, como es el caso del euro, conllevaría riesgos, como los sistémicos, pero si funcionara, tendría muchas ventajas, según Leite.

"Como bloque tendrían mucha más integración y la posibilidad de una mayor sinergia entre las economías, porque tendrían una unión monetaria y también una unión aduanera. Tendrían mucha más fuerza política e internacional", advierte.

Sin embargo, la creación de una coalición debe tener una visión a largo plazo. El investigador comenta que la cuestión es mantener los 14 países como un todo, con una balanza comercial que permita que la moneda no tenga la devaluación inicial.

Consecuencias para Francia

Los analistas señalan que una moneda propia en las naciones africanas sería muy perjudicial para la antigua colonia.

"Dependiendo de cómo estos países quieran desarrollar sus economías, esto podría afectarles, porque estos países todavía tienen una relación muy fuerte con Francia, de importaciones y exportaciones, especialmente importaciones a Francia", subraya Leite.

Caomique indica que Francia necesita los recursos naturales de Níger, Burkina Faso y Mali para mantener sus transacciones económicas, así como sus posiciones geoestratégicas y geopolíticas en el contexto africano.

"En el caso de Níger, una reserva considerable en términos de recursos naturales y productos que Francia necesita para su programa nuclear", afirma.

 

(Con información de agencias)

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...