¿Qué es de la vida de Mabel Lolo?

Archivo El Observador

Ese episodio de 2002 fue uno de los más emblemáticos de los sucesivos conflictos entre la Asociación de Empleados y Obreros Municipales (Adeom) y la IMM que han sido moneda corriente a lo largo de los años. En esa época, Mabel Lolo era una pieza clave del gremio y considerada como una de las más radicales. A sus 75 años, está jubilada como funcionaria municipal pero sigue activa. “Yo soy combativa de la vida. Soy guerrera”, afirmó en diálogo con El Observador.

No recuerda cuando fue su última entrevista, aunque reconoce que pudo haber sido en 2015. Su carrera sindical comenzó en 1962 en Amdet, la antigua empresa de transporte de pasajeros de Montevideo. Muy rápido, según recuerda, pasó a integrar el sindicato. Eso duró hasta que la empresa cerró por la dictadura y ya para 1976 ingresó a la IMM. En Adeom lideró la Lista 17 y llegó a ocupar el cargo de secretaria general durante varios años. También formó parte de la Comisión de Mujeres del PIT-CNT. 

Diego Battiste

Hoy preside el Club Municipal, desde donde tiene vista directa hacia el edificio municipal. También es concejala vecinal por su barrio, Buceo, y divide el poco tiempo libre entre las películas de ciencia ficción, que asegura le “encantan”, así  como el teatro, el ballet, la ópera y la lectura. 

En el Club Municipal impulsa una “revitalización” de las instalaciones y de la propuesta para los afiliados. Por el momento son solo 300 socios pero pretende que lleguen a los 1.000. Las obras, en conjunto con el Ministerio de Transporte y Obras Públicas, tienen como objetivo la construcción de una piscina en el segundo piso, un ascensor, vestuarios, rampas de accesibilidad, así como una sala de musculación. Para 2020 Lolo pretende tener toda la estructura pronta. 

Actividad sindical

Aunque está alejada de la actividad sindical, sigue integrando la Comisión de Vivienda de Adeom y no deja de lado, ni por un segundo, las convicciones que la hicieron famosa en sus años de lucha. Las décadas de estudio del digesto municipal, así como de las normas y los derechos y obligaciones de los trabajadores la mantienen como una referente. De forma esporádica, según narró, recibe consultas de compañeros que le piden su consejo por determinado problema laboral. Lo mismo sucede con los propios jerarcas de la comuna, a quienes también asesora.  “Lo que pasa es que uno tiene unas definiciones de vida que no terminan cuando uno se jubila. Es una cuestión filosófica en el sentido de que uno sigue peleando para que los trabajadores tengan más derechos”, comentó. 

Valeria Ripoll, la actual secretaria general de Adeom, ha sido comparada muchas veces con Lolo y en entrevistas le han preguntado si se considera “más combativa” que su antecesora. “Valeria es distinta a mí. Hizo un camino distinto. Yo veo que ella se expresa correctamente, sabe de lo que está hablando. No sé si ha estudiado, pero hace los planteos de forma correcta”, explicó Lolo. “¿Sabés por qué me comparan? Porque son machistas. Porque si sos mujer te comparan con alguien”, expresó la exsecretaria general de Adeom. 

Archivo El Observador

A nivel general, sin embargo, entiende que dentro del sindicato se ha perdido la capacidad de discusión, sobre todo a nivel ideológico. “Me parece que falta un poco de participación. He planteado en algún momento que se hagan cursos de derechos y obligaciones, porque los compañeros probablemente no saben ni sus derechos ni sus obligaciones”, afirmó.  Por esta razón, también extraña la “participación ideológica” que hace varias décadas solía definir a los sindicatos. Es que para Lolo integrar un sindicato significa una militancia en el marco de la “lucha de clases”. “Hacíamos congresos en los que discutíamos de todos los temas”, recordó y aseguró que eso se ha perdido. 

La IMM y el Frente Amplio

Lolo pasó por intendentes colorados, blancos y del Frente Amplio (FA), partido por el que militó dentro del Movimiento de Participación Popular (MPP). En su opinión, Adeom se persigue su propia cola cada vez que discute por la presupuestación de los trabajadores. “Vengo sosteniendo hace mil años que habría que dilucidarlo (el problema por las presupuestaciones) en el ámbito judicial”, precisó, y argumentó que las normas establecen claramente que luego de seis meses los trabajadores contratados deben pasar a ser presupuestados, salvo que se les otorgue una prórroga o que no cumplan con las evaluaciones. 

Incluso con los intendentes del FA la relación con Adeom ha sido difícil. “No hay posibilidad para los trabajadores de participar en nada. Nunca fue prioridad de ninguna administración y no es una cuestión de partidos, sino de la propia concepción de la intendencia”, precisó.  Siempre está la eterna lucha de quién manda y quién es más fuerte: si el intendente o los sindicatos, dijo. Por eso, sigue defendiendo el paro y la ocupación como una medida de lucha. “Pero, hay que hacerlo cuando corresponde”, aclara.

Diego Battiste

Aunque militó de forma activa por el FA, ya no lo vota más. “Cuando tenés premisas que te definen, más allá de los grupos que lo integran, y no se cumplió ninguna…”, sostuvo en relación a los principios que el oficialismo prometió defender. En este sentido, aseguró que el capitalismo avanzó y se consolidó con los gobiernos de izquierda. Y opinó que lo mismo pasó con la llegada de multinacionales y el descuido del medio ambiente, con casos como UPM o de la minera Aratirí.

Su desencanto con el Frente Amplio la llevó a pensar en formar un grupo político. “Después lo descarté. Hay que trabajar con la gente”, destacó. Aseguró que la desvela el problema de la educación, sobre todo a nivel de los adolescentes. Dice que, por ahora, el sistema de primaria sigue funcionando bien pero que la secundaria es una “agonía” para los jóvenes. También le preocupa que la tecnología y las nuevas formas de comunicación fomenten cada vez más el “individualismo” en las personas. Extraña la comunicación cara a cara y el trabajo de forma colectiva.