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Mujica dijo que no quiere experimentos de cambio como el argentino
"Yo no quiero experimentos como el argentino. (...) Y sé por conocimiento histórico que los dolores de Argentina golpean en casa. 'Cambiemos'... ¡En la vida se puede cambiar para peor! (...) ¿Es perfecto? No, seguro que tiene defectos. Pero no me hagas tirar las joyas de la abuela para tapar agujeros. Esto es lo que está en juego en este proceso electoral: no podemos caer en la ilusión de que todo está perfecto, porque eso choca con la realidad", disparó el expresidente José Mujica este sábado en el marco de los festejos por los 30 años del Movimiento de Participación Popular (MPP).
El discurso del líder histórico del MPP se centró en la necesidad de mantener la unidad y en tener presente la historia. Miles de personas se congregaron en el Parque Capurro para celebrar un nuevo aniversario de la agrupación con mayor adhesión del Frente Amplio. Ana Prada, Patricia Kramer, Gerardo Nieto y León Gieco musicalizaron la espera de los tres oradores de la noche: el diputado Alejandro Sánchez, la precandidata Carolina Cosse y Mujica.
Por su parte, la exministra de Industria, que secunda a Daniel Martínez según el consenso de las encuestas en la interna del FA, se embanderó con la "unidad" del sector que impulsó su candidatura. "El MPP, desde mi punto de vista, ha hecho gala de algo muy difícil, que es la unidad. Porque cuando se es un grupo pequeño es más fácil ser unitario, pero cuando se es un gran grupo, serlo indica honestidad y una profunda comprensión del rol histórico de la izquierda", resaltó Cosse.
"Se me ensancha el alma cuando veo al pueblo lúcido, siempre lúcido, cerrando filas para avanzar. Cundo veo a los más jóvenes entusiasmados con la convicción de su época y a los más viejos exigiéndonos que los llevemos al futuro. Son la fuente de energía para seguir andando. Y en cada abrazo, en cada gesto de afecto, en cada emoción compartida me abraza la responsabilidad", exclamó en su discurso, que duró cerca de 25 minutos.
La precandidata del MPP aseguró que esa responsabilidad es la misma que sintió cuando Mujica le ofreció la presidencia de Antel o cuando el presidente Tabaré Vázquez le confió la dirección del Ministerio de Industria, Energía y Minería. "Es una responsabilidad que no asfixia, es fuente de energía. Y es esa fuente de energía la que nos permitió concretar realidades y proyectos. Y son esas realidades y proyectos los que nos permiten afirmar que estamos muy bien preparados para seguir cambiando para el reto del presente y el desafío del futuro", afirmó.
"Nunca llegamos, porque siempre estamos llegando y porque hay que seguir, seguir con la ardiente paciencia que nos decía Neruda, hay que seguir almacenando esperanza. Porque frente a la incertidumbre del mundo, nosotros tenemos certeza", prosiguió Cosse.
El discurso de la precandidata se centró, también, en la profundización de los logros alcanzados por el Frente Amplio, pero con un nuevo enfoque, una idea a la que hizo referencia en varias oportunidades. "Les propongo seguir distinto, no igual, porque estamos partiendo de otro lugar. Por eso proponemos una segunda generación de cambios. Es eso, es seguir distinto, con un salto en calidad. La tarea más importante es movilizar a todo el Uruguay y avanzar centímetro a centímetro para lograr que la mayor cantidad de personas voten el 30 de junio. Para que nuestro Frente Amplio salga fortalecido. Para que estemos más cerca de una nueva generación de cambios. El 30 de junio vamos a estar definiendo cuál de los futuros posibles de Uruguay va a ser", sostuvo.
El peso de Mujica sigue intacto
El discurso de Mujica duró más de una hora y fue el más aplaudido por los militantes que se congregaron en torno al escenario. Tuvo dos partes: una en la que se refirió al momento fundacional del MPP y otra en la que habló de los desafíos del futuro, para el que hay que tener presentes el camino recorrido y la historia. Asimismo, mencionó los desafíos que el país debe superar: la seguridad pública, la dependencia económica de otros países y la seguridad social.
"Compañeros, tenemos que mirar, y yo sé que estamos en una coyuntura electoral, pero tenemos que ser conscientes del valor de los bienes públicos que tiene el Uruguay, que no son solo los que hemos podido hacer en estos años. Es la sumatoria de lo que hicieron a veces nuestros abuelos, nuestros bisabuelos. El país no empezó con nosotros ni termina con nosotros. (...) ¿Por qué les digo que hay que cuidar eso? Porque es a partir de conservar eso que tenemos que avanzar y progresar, y no tirarlo por la borda", sostuvo.
Según el expresidente, "la crisis económica generó crisis política". "A veces los uruguayos hablamos como si fuéramos el ombligo del mundo.Yo no sé cómo pueden decir 'yo no voy a subir el precio de los combustibles'. Ah, ¿pero vos sabés cuánto va a valer el barril de petróleo dentro de un año? ¿Y sabés cuánto va a valer el dólar en la Reserva Federal? ¡Ni Mandrake sabe!", ironizó. Advirtió, sin embargo, que "si no se invierte no hay progreso económico" y dijo que, eventualmente, el Estado deberá "unir la capacidad que tiene el país de ahorrar".
Seguridad: "eficiencia represiva"
Con el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, escuchándolo al borde del escenario, Mujica reconoció que la seguridad pública es un problema. "Chocolate por la noticia. Tolerancia cero. Pero hermano, ¡si seguís así no te vas a tolerar ni a vos mismo", bromeó sobre la propuesta de Edgardo Novick, precandidato del Partido de la Gente.
"Yo creo que el Estado es fuerte, no tengo miedo. Tiene formidables fortalezas. Lo que está flaco es de inteligencia, que es otra cosa. Esto no se arregla con amontonar carne con ojos y uniformes. Hay que meterse adentro del tejido del delito. ¿Por qué? Porque la revolución digital también está cambiando ese mundo. Porque los valores de hoy son distintos, se están globalizando para el carajo. Hay muchachos cuyo héroe no es el Che Guevara, es (Pablo) Escobar. Hay muchachos que se les está perdiendo la vida en la cárcel y piensan 'a mí se me apaga la luz'. (...) Estamos educando tácitamente que triunfar en la vida es ser rico y el que no es rico fracasó", explicó.
"Tenemos un problema, se nos pudre la vida de gente joven en cana al santo pedo. Se pierden la mejor edad para el amor y están en cana, pelotudos. Y se creen vivos y son unas pobres víctimas. Pero si te agarran te sacan la sangre, ¡mirá qué negocio! Una cosa es el bueno y otra es el nabo. Entonces, hay que tener claro que se necesita eficiencia represiva porque hay que cuidar a la sociedad y tenemos que luchar mucho por un mecanismo de inteligencia", reconoció.
Por otro lado, Mujica reiteró que otro "problema inevitable" es la seguridad social porque son más de cuatro puntos del PIB que directa o indirectamente se transfieren de la caja fiscal. "Pero lo peor no es eso, lo peor es que tiende a aumentar porque somos un país de viejos, vivimos más", aseguró. No obstante, dijo estar "podrido" de expresiones como "shock de austeridad", acuñada por Luis Lacalle Pou, precandidato del Partido Nacional. "Vamos a empezar por casa para tener autoridad moral", pidió.
