Una mujer de 61 años murió luego de haber sido apuñalada por su hijo el pasado 9 de noviembre en una vivienda de 18 de Mayo (Canelones). La víctima había quedado tirada en su dormitorio con varios cortes de arma blanca. La policía la trasladó grave al Hospital de Las Piedras.
Su hijo es un hombre de 40 años con dos antecedentes penales por hurto especialmente agravado en el 2002 y dos delitos de rapiña especialmente agravados en 2004, informó la policía. Su caso fue formalizado luego de ser detenido por un delito de intento de homicidio especialmente agravado, pero la Justicia entendió que es inimputable.
“Maté a mi madre. Llamá a la policía antes de que lleguen mis hermanos. Y llamá a mi padre”, fueron sus palabras tras herir de gravedad a su madre aquella noche del miércoles.
La policía fue al lugar y lo detuvo. A pedido de la fiscal de Las Piedras, Irena Penza, al hombre se le realizó una pericia psiquiátrica en el Hospital Vilardebó, informó entonces El Observador.
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