La Administración Nacional de Puertos (ANP) resolvió archivar el proyecto presentado por la naviera Mediterranean Shipping Company (MSC) para la construcción y operación de una segunda terminal de contenedores. Las autoridades habían solicitado a la empresa que presentara un plan de reubicación porque el lugar elegido no era el adecuado. Vencido el plazo y sin que cumpliera con lo requerido, el Directorio del organismo dejó sin efecto la propuesta.
La iniciativa fue presentada a fines de 2017 por Terminal Investment Limited (TIL), propiedad de MSC, la segunda naviera más importante del mundo. Semanas después la ANP resolvió que fuera analizada por un equipo de técnicos. La evaluación comenzó a mediados de 2018 y culminó en los primeros meses de este año. El resultado no fue favorable para TIL.
Los técnicos plantearon una objeción central al emprendimiento: las maniobras de atraque que deberían hacer los buques cargueros para acceder a la nueva terminal. La propuesta de TIL manejaba una alternativa, pero los expertos señalaron que no tomaba en cuenta “la circulación hacia y desde el muelle C, su ampliación, y la terminal granelera”.
Añadieron que la opción prevista por la empresa obligaría a los barcos a girar fuera de las dársenas del puerto, entrar marcha atrás y con tres remolcadores. Por tanto, tomando en cuenta ese inconveniente, además de otros argumentos, concluyeron que no era posible avanzar con la propuesta en los términos planteados.
Pese al análisis negativo, el Directorio de la ANP, con los votos oficialistas, decidió continuar adelante con la iniciativa. Los jerarcas consideraron que si el impedimento fundamental para la nueva terminal de contenedores era su ubicación, TIL podría localizarla en otra zona del puerto. Entonces, le otorgó un plazo de 60 días para presentar un estudio de factibilidad.
El plazo venció y la compañía no presentó ningún documento ante la ANP. Este miércoles el tema fue tratado por el Directorio. Allí, las autoridades entendieron pertinente dejar sin efecto la aceptación de la propuesta “dado el desinterés” de TIL y archivar el expediente.
Desde la presentación del proyecto original hasta la decisión final transcurrió un año y medio.
Cuando MSC transmitió sus planes a la ANP generó un cortocircuito con Katoen Natie, propietaria mayoritaria de Terminal Cuenca del Plata (TCP), única especializada en contenedores dentro del puerto de Montevideo.
En ese momento, la multinacional de origen belga se encontraba en medio de un proceso de venta de TCP e interpretó que la propuesta de la naviera buscaba el fracaso de la operación. En enero de 2018 emitió un comunicado y allí señaló que “en el entendido de que la iniciativa tiene como principal objetivo hacer fracasar este proceso, nos vemos en la obligación de comunicar que Katoen Natie ha decidido la suspensión de la venta, hasta que la autoridad formalmente resuelva la solicitud presentada por MSC”.
Ahora, con la decisión oficial tomada habrá que ver si Katoen Natie retoma el proceso de venta de TCP o la continúa operando.
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