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El primer fin de semana del flamante gobierno de Alberto Fernández en Argentina comenzó con la puesta en marcha de una serie de proyectos que tendrán un impacto de magnitud en la economía del vecino país y también en la temporada turística uruguaya. Decretó la doble indemnización para los despidos sin causa, subió las retenciones a las exportaciones (en realidad, quitó el “techo” que tenían, lo que en los hechos implica una suba) y confirmó que la Ley de Solidaridad y Reactivación Productiva, el proyecto ómnibus que quiere que el Congreso apruebe en sesiones extraordinarias, propone un "dólar turista" con un impuesto de 30% para los gastos en el exterior (incluyendo los turísticos pero también la contratación de servicios) .
Todos estos puntos, que integrarían un “plan integral” para reactivar la economía del vecino país, y algunos más se conocieron en apenas unas horas, entre la noche del viernes y el mediodía del sábado.
La implementación de un "dólar turista", es decir un dólar con un valor más alto para los gastos que se hacen en el exterior, era uno de los rumores que se venían escuchando desde antes del cambio de gobierno. Este sábado, en declaraciones al diario La Nación, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, confirmó que está planteado en el proyecto que la Casa Rosada enviará al Congreso.
La medida, por un lado, reforzaría el cepo, ya que alcanza a consumos que no tenían límite; y, por el otro, le servirá a la actual gestión como un extra en la recaudación.
La reposición de la doble indemnización para despidos sin causa era otra medida de la que ya se venía hablando, hasta que este viernes a última hora se confirmó con el Decreto de Necesidad y Urgencia que repone esa medida que había usado el gobierno de Eduardo Duhalde y que había sido derogada por el de Cristina Kirchner.
A tal punto era un “temor” de los empresarios que varias empresas habían acelerado sus planes de ajuste de planta, la mayoría de las veces con otros argumentos.
La doble indemnización es una medida que genera no poca controversia. Sus defensores sostienen que es casi la única salida seria para frenar los despidos y el aumento del desempleo en medio de la prolongada crisis económica que sufre Argentina. Sus detractores argumentan en cambio que pisa las posibles intenciones de contratación de nuevos empleados y puede complicar al extremo la situación de muchas empresas, en particular pymes. Aún falta conocer detalles sobre cómo se implementará.
En un decreto develado en una inusual publicación de sábado del Boletín Ocial, el gobierno resolvió modificar el esquema de retenciones que había establecido Macri cuando se vio obligado a reponer las alícuotas a las exportaciones tras haber alzado la eliminación de la mayor parte de ellas como bandera junto a un programa de reducción paulatina de las que mantenía la soja.
Cuando la administración anterior repuso las retenciones -que en el caso de la soja,se sumaban a las que seguían vigentes- había planteado una alícuota del 12% pero con un “techo” de 3 pesos argentinos por dólar para las exportaciones industriales y 4 oesos argentinos por dólar para las de productos primarios. Eso, en los hechos, permitía que las retenciones se fueran licuando. Si bien al momento de empezar representaban apenas un poco menos que un 12% (y alrededor del 9% para la industria), a hoy ya implicaban una tasa de entre el 5% y menos del 7%.
El decreto firmado por Cafiero y los ministros de Agricultura, Luis Basterra, y Economía, Martín Guzman, elimina ese techo, deja la alícuota en el 12% para las exportaciones agropecuarias y las “reduce” al 9% para otros bienes y servicios. Así, todos los bienes alcanzados sufren un aumento de las retenciones. Y la soja, que suma este 12% al 18% que seguía vigente, queda con una alícuota del 30%. La decisión desató la inmediata protesta de las entidades ruralistas.
Si bien Cafiero sostiene que no se modificó el esquema, lo cierto es que el que había aplicado Macri implicaba que la tasa se iba licuando a medida que subía el dólar. Con lo establecido en el decreto del sábado, eso ya no volverá apasar.
En sus considerandos, el decreto plantea específicamente que la medida busca aumentar los ingresos dada la grave situación fiscal. Los nuevos porcentajes afectarán a más de 78 millones de toneladas de soja, maíz y trigo y le garantizarían al gobierno una recaudación extra de unos US$ 2.000 millones en el año.
La suba de Bienes Personales es otra de las medidas incluidas en la “Ley de solidaridad y reactivación productiva”, según señaló Cafiero a La Nación. El proyecto “tiene un aumento de las alícuotas de bienes personales, con los mismos topes”, confirmó el ministro, que especificó que la propuesta es aumentar las alícuotas de las distintas escalas del tributo: “La del 0,25% pasaría al 0,50%; lo que ahora 0,50% pasa a 0,70% y así”.
El jefe de Gabinete también puntualizó que “a los que tienen bienes en el exterior,se les aumenta un poco más” con una retribución extraordinaria” y que está prevista también “una compensación” para quienes repatrien esos bienes.
(El Cronista - RIPE)
Por Romina Manguel
Por Fernando Pedrosa
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