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Peaje de Pando registró más de 3.000 vehículos por hora
El peaje del arroyo Pando, en el kilómetro 33 de la ruta Interbalnearia, es la referencia de cada cambio de quincena. Este domingo —en que el retorno a la capital de quienes vacacionaron las dos primeras semanas del año coincidió con las altas temperaturas— este peaje-termómetro marcó un pasaje pico de más de 3.000 vehículos por hora.
En la tardecita de este domingo, cuando la Policía Caminera estimaba el pico máximo de flujo vehicular, en los balnearios del este había 27 grados. Eso llevó a que se retrasase el horario de mayor circulación y que el peaje de Pando haya tenido su esplendor tras la caída del sol.
La colocación de telepeajes hizo que, pese a la magnitud del tráfico, la circulación por la ruta Interbalnearia fuera “fluida y sin filas”, dijo la vocera de Caminera, Vanessa Briozzo. Solo en el tramo que une al balneario Las Vegas con Pinamar hubo un enlentecimiento del tránsito: allí la media fue de 55 kilómetros por hora.
También hubo otro en algunas rutas secundarias. En concreto, un incendio a la altura del kilómetro 89 de la ruta 11 llevó a un desvío donde esa arteria se cruza con la ruta 89. La Dirección Nacional de Bomberos, a su vez, reportó focos bajo control en otros diez puntos: “al menos uno por región”.
La Policía Caminera había exhortado a los veraneantes a que evitasen la circulación por las rutas entre las 18 y 21 horas. El pedido cobró especial significado tras una primera quincena en que hubo 20 fallecidos por accidentes de tránsito. La Unidad Nacional de Seguridad Vial se reunirá el próximo miércoles para analizar este aumento de la siniestralidad fatal.
Según informó Caminera, el pico se dio entre las 17:00 y las 18:00.
Hacia el este
Según Caminera, durante la tardecita del viernes y la mañana del sábado se había intensificado el flujo de vehículos hacia los balnearios de la costa este. Muchos de esos pasajeros aprovecharon el buen pronóstico del estado del tiempo para escaparse de la urbe por el fin de semana. Pero al mediodía de este domingo empezó a sumarse otro público: los argentinos que ingresaron a Uruguay para aprovechar la segunda quincena de enero.
En el puente que une la ciudad de Fray Bentos con Puerto Unzué, cercana a Gualeguaychú en la provincia argentina de Entre Ríos, la fila de espera de los vehículos que deseaban ingresar a Uruguay superó los dos kilómetros y la espera para los trámites migratorios excedió los 90 minutos. En el sentido opuesto, para el ingreso a Argentina, el tránsito era fluido, según reportó la Dirección Nacional de Migración.
Una demora apenas inferior se vivió en el puente de Paysandú: la cola allí demoró 60 minutos. Casi la misma tardanza aconteció en el puente de Salto. Así hasta la tardecita en que se invirtió el flujo: se intensificó la salida desde Uruguay (de quienes dejaban el país tras la primera quincena de enero) y se apaciguó la entrada.
El ministro interino de Turismo, Remo Monzeglio, dijo a El Observador que “están entrando turistas con bastante fluidez, sobre todo del lado argentino. Son más los que están entrando que saliendo, aunque eso se puede revertir con el correr de la horas”.
Hay casos de propietarios argentinos que pudieron alquilar sus fincas en Punta del Este solo la primera quincena, “y es probable que esos propietarios se vengan a usar los apartamentos para esta segunda quincena”, explicó el ministro interino.
En este sentido, señaló el jerarca, “la segunda quincena de enero, que históricamente suele ser más baja que la primera, es probable que repita una baja, pero no en forma drástica”.
A diferencia de la primera quincena, en que existe una combinación de turismo interno y externo, “acorde pasa el verano empieza a jugar un rol más preponderante el turismo interno, por lo que se espera una alta ocupación hotelera y de zonas de camping en lo que se llama fin de semana prolonga: de miércoles a domingo”.
En la tercera semana de febrero, a su vez, caen los feriados de carnaval. La fecha —casi dos semanas antes que el inicio de las clases— hace prever una buena temporada. Al respecto, Monzeglio recomendó “a la población a que tome las precauciones y vaya reservando su lugar: cuanto más tiempo de antelación para reservar, mejor serán las tarifas y la planificación del servicio”.
Puja política
La terminal de ómnibus de Tres Cruces fue testigo este domingo del incremento del flujo turístico. Desde la tarde hasta las primeras horas de la madrugada pasaron unos 70.000 turistas (algunos que salían y otros que regresaban).
La magnitud de movimiento observada en la terminal fue un 35% superior a la registrada el año pasado, pero 15% por debajo de la prepandemia.
Esta tensión entre la mejora de los guarismos, pero a menor escala que en tiempos previos a covid-19 llevó al cruce de opiniones entre líderes opositores y del oficialismo.
Monzeglio había dicho tras año nuevo que se trataba “del mejor inicio de temporada de las últimas cuatro décadas”. Para ello fundamentó que el porcentaje de ocupación hotelera alcanzaba el 100% en buena parte de la franja costera.
Por su parte, el presidente del Frente Amplio, Fernando Pereira, cuestionó los dichos del ministro interino y apunto: “Se habla de una temporada récord en turismo. ¿En base a qué? Van nueve de días de enero. En base a qué se puede tener esa certeza de temporada récord".
Analía Suárez, presidente del Centro de Hoteles de Punta del Este, tiene una opinión intermedia. Este domingo, en diálogo con Subrayado, dijo: "Viene siendo una buena temporada para lo que venía siendo en pandemia, pero no es la mejor temporada".
El Ministerio de Turismo informó que “a fines de enero o principios de febrero” el Observatorio de Turismo publicará los primeros datos oficiales del inicio de la temporada estival.
