La Fiscalía de Homicidios de 3° Turno, encabezada por Adriana Edelman, pidió que se condene a 29 años de cárcel al imputado por el homicidio de Lucas Zanolli, el joven de 18 años que fue asesinado cuando salió a vender su auto en noviembre de 2021. Su cuerpo fue encontrado en la casa de quien hoy está señalado por el crimen.
Según la acusación fiscal, a cuyo texto accedió El Observador, Zanolli puso a la venta su auto, un Volkswagen Gol, y el 3 de noviembre, un hombre que se identificó con su primer nombre y segundo apellido le escribió por Marketplace y le hizo varias preguntas.
A partir de ahí, hubo tres encuentros. El último –el realizado el 29 noviembre– terminó con el homicidio de Zanolli. El primero fue el 20 de noviembre, en la casa de la víctima y, con su novia presente, conversaron cerca de una hora y media sobre todos los detalles del auto, incluido el sistema GPS que tenía, y salieron a probarlo.
El sábado 27 pactaron otro encuentro, sobre las 15:00 horas, y repitieron la rutina de la reunión anterior. Dos días después, el 29, el supuesto interesado se volvió a comunicar con Zanolli y le dijo que iría ese día, sobre las 18 o 18:30 horas, a concretar la venta. Además, le especificó que iría con su madre.
El imputado llegó a la casa de Zanolli en un taxi junto a una mujer, que según la fiscalía no era su madre. La víctima estaba con dos amigos, a quienes les dijo que saldría a dar la última vuelta en el auto con el comprador, para luego hacer la transacción.
Pasaron 20 minutos y sus amigos notaron que Zanolli no volvía. Tenía el teléfono apagado y su última conexión en WhatsApp era de las 18:40 horas, por lo que rastrearon el GPS. Pero la última señal que había emitido había sido desde las calles Manuel Fortet y Colman a las 19:28.
Salieron a buscarlo por el barrio y como no lo encontraron denunciaron su desaparición a la Policía. Las cámaras de seguridad del Ministerio del Interior lograron captar el vehículo y vieron que estaban Lucas y el imputado en los asientos delanteros y una mujer en el asiento de atrás.
De acuerdo al relato fiscal, el imputado y la mujer estrangularon a Lucas "durante las primeras horas" de iniciado el recorrido. El homicida luego escondió el cuerpo y el auto en su casa en Jardines del Hipódromo. Para intentar eludir a las autoridades, le cambió la chapa al vehículo.
Cuando la policía allanó su casa, encontró que había dejado la campera blanca que vestía cuando mató a Lucas en remojo. Encontraron el cuerpo de la víctima en un pequeño galpón que tenía en el fondo y sospechan que estaba esperando "el momento indicado" para deshacerse del cuerpo.
Dentro de su casa encontraron una escopeta, cartuchos de distintos calibres y una pistola Bersa. También, la matrícula original del auto de Lucas.
La fiscalía pidió que se condenara al imputado por un delito de homicidio muy especialmente agravado por cometerse para consumar otro delito (el robo) con un delito de tráfico de armas y un delito de receptación. Las agravantes que entiende la fiscalía que se tienen que computar son la alevosía y el abuso de confianza. El atenuante es que es primario.
"El homicidio se cometió para sustraerle el vehículo, en claro abuso de confianza de la transacción que se realizaría y en circunstancia en que la víctima se encontraba sola, desprevenida, actuando este sobre seguro y encontrándose en situación de indefensión", expresa la acusación.
La fiscal Edelman descartó que la mujer que él presentó como su madre realmente lo fuera. Su verdadera madre, con quien convivía en la casa en la que fue detenido, estuvo demorada y logró comprobarse que no era ella quien iba en el auto junto al homicida.
Sin embargo, según supo El Observador, las imágenes extraídas de las cámaras de seguridad no permiten identificar a la mujer que los acompañaba. A su vez, el imputado se ha negado a identificarla y ha brindado información engañosa, que no permitió llegar a la otra responsable del crimen.
En una audiencia judicial celebrada dos semanas atrás, el abogado del imputado pidió a la Fiscalía que se diligencien nuevas pruebas que podrían apuntar a la identidad de la mujer.
A partir de la presentación de la acusación fiscal, la defensa tiene 40 días para responder y luego de eso comenzará el juicio oral.
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