El terremoto de 7.8 grados que afectó a Turquía y Siria dejó como saldo más de 1.800 muertos hasta la mañana de este lunes y más de 2.800 edificios derrumbados.
Hasta el momento no se reportaron víctimas o afectados uruguayos, reportó Cancillería, pero el sismo llegó a registrarse en Uruguay: en un sismógrafo de Florida se detectó la llegada de energía proveniente del terremoto que afectó a los dos países, confirmó a El Observador la sismóloga Leda Sánchez.
La especialista indicó que en Florida "se registra la llegada" de energía de distintos terremotos, a través de un "tren de ondas" que toma el sismógrafo.
En este caso, en Florida se registró un aumento de ondas sobre las 1:32 de la madrugada, como se puede ver en la imagen que compartió Sánchez a El Observador.
Leda Sánchez
Registro de llegada de energía en Uruguay por el terremoto en Turquía y Siria
La sismóloga indicó que la zona afectada en Turquía y Siria "tembló toda la noche" y lamentó que "sigue habiendo réplicas importantes". Sin embargo, detalló que en Florida solo se registró la consecuencia de la actividad del terremoto de mayor escala.
La especialista indicó que estos terremotos lejanos se ven "mejor" cuando tienen "mayor profundidad" respecto a la superficie. Fue algo que se pudo percibir desde Uruguay debido a que tuvo una profundidad menor a los 15 kilómetros.
Sánchez afirmó que en Florida también se han registrado movimientos cuando ocurrieron sismos en Chile, Japón, Indonesia, entre otros países.
Ondas y la magnitud del momento
Las ondas se miden en cantidad de "cuentas", que luego a través de distintos cálculos, que en parte dependen de la lejanía del sismo ocurrido con el lugar donde se mide, llevan a reportar de cuántos "milímetros por segundo" fue el movimiento registrado, explicó Sánchez.
Esta medición se realiza en promedio con varias mediciones de cuentas en distintas zonas, con las que se estudia el movimiento que generan sismos de gran índole en una región.
El cálculo culmina en la "magnitud del momento", un registro que suplantó a la "escala de Ritcher" y que mide "la cantidad de energía que se libera en un terremoto", explicó Sánchez.