El ministro de Defensa, Javier García, visitó el Batallón de Infantería Mecanizado N°15 y el Batallón de Ingenieros N°2 de Florida en la tarde de este lunes, para reconocer los daños que dejó la turbonada que afectó al departamento el sábado pasado.
García calificó al suceso como "una desgracia con suerte", por no haber comprometido la salud del personal, pero expresó que en el Batallón de Infantería N°5, un establecimiento con un tamaño de 1.000 metros cuadrados, se produjeron "pérdidas muy significativas en alojamientos, consultorios odontológicos, depósitos y alimentos".
Refiriéndose a los reiterados eventos climáticos que el país está atravesando, declaró que "como país, como Estado y como sociedad, tenemos que estar preparados". "Hay que pensar en un tipo de ingeniería de construcción que sea apta para soportar este tipo de eventos climáticos, que se dan cada vez con mayor frecuencia", dijo.
García dijo que, según el jefe de la unidad, había poco personal en el momento del temporal, debido a las licencias y otras personas que estaban en su casa. "Cuando uno ve las fotos de ese momento, ve que fue brava la mano", añadió.
Habiendo consultado con el comandante en jefe del Ejército Gral. Gerardo Fregossi, declaró que si se valuaran las pérdidas en términos de construcción tradicional, "podría arrimarse al medio millón de dólares". La edificación que sufrió daños totales, según declaró, era una construcción liviana que había sido donada por una empresa, pero la que se construirá en su lugar será de tipo tradicional, que al contar con la mano de obra del personal militar, se abaratará el costo de la reconstrucción. Sin embargo, remarcó que requerirá instalación eléctrica y sanitaria, además de nuevos equipos y mobiliarios, lo que significará un costo importante: "Una cantidad de material, de recursos, que son muy valiosos, que no son solo las chapas del techo o los paneles".
Consultado en cuanto a la situación sanitaria dentro de las Fuerzas Armadas, García declaró que según el último dato, de la tarde del viernes, había 550 casos positivos de covid-19. "Sigue una tendencia muy pareja con lo que pasa en la sociedad". Aclaró que la cifra no comprende solamente al personal efectivo, sino también al de las dependencias comunes, en los trabajos de corte administrativo.
Recordando el brote que se dio en la misión de paz en el Congo semanas atrás, dijo que se negativizaron gran parte de los efectivos y que "por ahora, está controlado". "Esperemos que más pronto que tarde podamos volver a cifras normales", concluyó.
A pesar de la falta de personal por covid-19, el ministro declaró que "no ha significado en ningún momento un detrimento de la función que se cumple", y que los jefes rearmaron sus equipos y suplieron personal cuando fue necesario. "La custodia de fronteras, de cárceles y todas las tareas que hacemos habitualmente, se están cumpliendo con absoluta normalidad", indicó.
García añadió que "cuando baje el tema sanitario y volvamos a una normalidad", el Ejército va a tener otro despliegue, abocándose más a las tareas de seguridad que a las de sanidad. "Tendremos más patrullaje móvil y menos puestos fijos", concluyó.
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