Conforme lo establece el reglamento para la elección del presidente/a del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), a partir de la notificación del cargo vacante, los gobernadores tendrán 45 días calendarios para proponer candidaturas, plazo que vence el próximo 11 de noviembre. El gobierno uruguayo entablará conversaciones para llegar a un candidato de "consenso" con los países de la región.
Luego, entre el 12 y 26 de noviembre, se deberá celebrar una reunión extraordinaria de la Asamblea de Gobernadores para la elección del nuevo presidente del BID.
La presidencia de Mauricio J. Claver-Carone al frente del BID terminó de forma abrupta tras una investigación interna que realizó el propio banco, después de que el exfuncionario fuera acusado de haber tenido una relación íntima con una empleada (algo prohibido) y de usar indebidamente los fondos de la institución. Según un informe independiente que encargó el organismo, la empleada —jefa de gabinete— recibió dos aumentos salariales. Claver-Carone había asumido su cargo en octubre de 2020 y debía culminar su mandato el 25 de setiembre de 2025.
Sin embargo, la Asamblea de Gobernadores, donde están representados los 48 estados miembros del BID, votó a favor de finalizar la administración de Claver-Carone, tal cual lo había recomendado previamente el Consejo de directores tras la investigación.
Los gobernadores del BID tendrán en cuenta la experiencia y conocimiento que posee el candidato sobre los desafíos de desarrollo que enfrenta la región, y su competencia en asuntos relacionados con las actividades, la gestión y la administración de instituciones financieras y/o de desarrollo nacionales o internacionales.
"Uruguay estará recorriendo este camino durante estos 45 días, y prevé mantener reuniones con directores y gobernadores del BID para intentar llegar con un candidato de consenso de la región", informaron a El Observador fuentes oficiales.
Según informó El Cronista de Buenos Aires, el plan para la nueva conducción del BID es que la presidencia vuelva a manos de Latinoamérica. Y aún más: que lo conduzca una mujer. Una que asoma como candidata es la expresidenta de Costa Rica Laura Chinchilla, quien se había anotado en la pelea anterior contra Claver-Carone para dirigir el organismo multilateral.
A la hora de la danza de nombres, la mexicana Alicia Bárcena, extitular de la Comisión para América Latina y el Caribe (Cepal) también podría anotarse para conducir el banco regional.
El tercer nombre que resonó en las primeras horas es el de Rebecca Grynspan, otra costarricense pero que ahora está al frente de la Conferencia para el Comercio y Desarrollo de Naciones Unidas (Unctad).
Para ser elegido, el candidato debe obtener una mayoría del poder de voto de los países miembros. El poder de voto varía según la cantidad de acciones que posee cada país miembro del capital ordinario del BID. El candidato ganador debe, además, contar con el respaldo de al menos 15 de los 28 países regionales. El presidente es electo por un período de cinco años, con la posibilidad de ser reelecto una sola vez.
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