Una de las mejores fertilizadoras del mundo está trabajando en Uruguay

Una de las mejores fertilizadoras del mundo, el equipo con la tecnología más completa desarrollado por la empresa alemana Rauch, fue adquirido por el contratista uruguayo Raúl Bernardi, de Palmitas (Soriano), y ya realiza tareas en chacras locales, según confirmó a El Observador la gerenta de exportaciones de la empresa ubicada en Baden Baden, Elke Pankow.

Se trata de la fertilizadora de barras neumáticas localizadas de precisión, modelo AGT 6036, que tiene 36 metros de ancho de labor, piloto automático, corte automático real de secciones cada seis metros para una dosificación precisa y distribución homogénea localizada de un amplio rango de peso, granulometría y mezcla de fertilizantes. Evita superposición y no es afectada por condiciones de viento. Además cuenta con lectura de mapas y aplicación con tasa variable y neumáticos de alta flotación.

"La máquina es un excelente producto, y una inversión muy importante, ya se ha probado en varios lugares con productores de punta en dosificaciones variables y fijas, además de siembras en cobertura, con excelentes resultados. Pero ha costado entrarle a la gente, que cómo buenos uruguayos somos reacios a las cosas nuevas. Estamos en un momento complicado en el que se mira más el el bolsillo a la hora de pagar un servicio y no se ve lo que se deja de ganar por no hacer las cosas bien aplicando estas tecnologías. Igual estoy convencido que es cuestión de tiempo para que se comience a adoptar, porque es un aporte más para obtener mejores resultados", comentó Bernardi a El Observador.

Rauch es una las empresas alemanas fabricantes de maquinaria agrícola más importantes de Europa, y se especializa en fertilizadoras de altísima tecnología, combinada con agricultura satelital, que permiten una aplicación inteligente.

En Alemania Rauch tiene 45% del mercado, está presente en otros 40 países y acaba de desembarcar en Uruguay. Las fertilizadoras Rauch se venden en algunos países con la marca Kuhn, empresa francesa que se encarga de su representación y distribución en algunos mercados como Francia, Italia y Sudafrica, entre otros.

La compañía alemana trabaja con el objetivo de ser líder mundial en fertilización y en los últimos años recibió 10 medallas a la innovación en Agritechnica, la exposición de maquinaria agrícola más grande del mundo que se realiza en Hanover.

Se trata de una empresa familiar que en 2014 facturó 76 millones de euros y que exporta el 60% de su producción. Solo en investigación y desarrollo la firma invierte 5 millones de euros anuales y allí trabajan 45 ingenieros altamente calificados, además de técnicos que reciben previamente una capacitación dual, donde trabajan tres días de la semana y los otros dos días reciben clases teóricas.

Los productos de la marca ofrecen gran precisión en las aplicaciones, algo muy importante para el agricultor porque le permite usar el insumo con gran eficiencia, considerando además su elevado costo; y también posibilita el cuidado del medioambiente, algo no menor.

El gerente de marketing de la empresa explicó durante una visita de 44 periodistas, entre los que estuvo El Observador, que la mano de obra especializada es cada vez más cara en Alemania y por lo tanto las marcas del país deben competir con innovación tecnológica permanente y con productos de muy alta calidad.

La planta industrial de Rauch está ubicada a apenas dos kilómetros de la frontera con Francia.