"Villa Española está intervenida por la Policía". Así describen en el Ministerio del Interior las acciones que están desplegando en las calles de ese barrio, que los vecinos miran con sensaciones encontradas, por el enfrentamiento entre "los Suárez" y "los Albín", dos clanes familiares que se disputan el dominio del territorio.
"Te ven en actitud rara y te piden la documentación, ven una moto sin matrícula y la siguen. Antes no lo hacían", contó un comerciante. "De noche hay dos camiones blindados en Varela y Corrales", acotó un cliente.
Diez minutos después, exactamente a las 18 horas, el barrio se revolucionó: ingresaron camiones blindados, camionetas de la Guardia Republicana y patrulleros que se dispersaron en nueve manzanas, divididas en tres cuadrantes.
Foto: Leonardo Carreño.
Intervención en Villa Española
Los vecinos empezaron a asomarse por la ventana primero, a salir a los patios y a la vereda después. La intervención era grande. Una mujer intentaba llegar a Camino Corrales en su moto, pero hacia donde girase había un despliegue de Policías que estaban haciendo 17 allanamientos en simultáneo.
–¡Allanamiento! –gritó un policía que llevaba un pasamontañas en la cara y un chaleco antibalas. Los efectivos entraron a la casa en Tomás Claramunt y Francisco Vázquez Cores.
–¡Hay niños ahí! –criticó, enojada, la vecina de enfrente.
A unas cuadras había otro despliegue, con Policías que lucían la palabra "intervención" en sus chalecos antibalas. Y a unas cuadras había otro operativo. Y a la vuelta otro allanamiento.
–"Mi esposa siente vergüenza" –dijo un vecino, mientras miraba desde la vereda de su casa cómo la Policía detenía a un joven que estaba tendido en el suelo.
–¿Por qué?
–Mira lo que es esto. ¿A quién vas a invitar a casa? –respondió.
Foto: Leonardo Carreño.
Allanamiento en casa de los Albín
La Policía tenía varios objetivos: incautar armas, drogas, detener a sospechosos. Los allanamientos estaban previstos en las casas de la familia Suárez y de la familia Albín, que son quienes se dedican al microtráfico en el barrio y que desatan las balaceras por el control del barrio. Pero, también en casas de personas vinculadas con esas familias.
En la casa de los Albín, el líder del clan, apodado "El Bicho", no estaba. Según los vecinos el hombre, que "está parapléjico por los tiros que ha recibido" se fue hace días del barrio. En la casa –que tiene un escudo enorme de Nacional pintado en la fachada porque, según los vecinos, "el Bicho era barra" tricolor–quedaron sus hijos.
La Policía de homicidios, de la Zona Operacional II y de Inteligencia estacionó más de 10 autos y camionetas y un camión negro blindado en la puerta de la casa de los Albín. Ejecutó el mismo operativo de manera simultánea a dos cuadras, en la casa de los Suárez.
En lo de los Albín la Policía cruzó la calle con uno de los detenidos esposado y revisó un auto Fiat Palio rojo que estaba estacionado frente a la casa , bajo la mirada de varios vecinos que se reunieron en grupos en las veredas. En la casa de los Suárez, frente a la fábrica de Funsa, los efectivos sacaron objetos de la vivienda, pero allí no circulaba nadie.
Foto: Leonardo Carreño.
Allanamiento en casa de los Albín
Al final del operativo, la Policía había detenido a cinco personas mayores de edad, todas de las familias Suárez y Albín, ambas conocidas por todos en el barrio.
Los vecinos los conocen porque son clientes de sus comercios, porque viven en la misma cuadra o porque hace 40 años fueron compañeros de escuela de los más viejos de los clanes. Algunos sienten rabia por no poder salir por los tiroteos, otros vergüenza y otros, incluso, arriesgan a tomar partido por una de las familias "porque los que arman lío" son los otros.
De los allanamientos la Policía incautó armas, droga, chalecos antibala, handys, celulares, balanzas de precisión. Los vecinos coinciden en que el problema en Villa Española no son los robos, de hecho, los comerciantes coinciden en que "hace años" que no sufren hurtos.
El problema, dijeron, es la violencia generada por la venta de drogas, las balaceras, el miedo a que una bala perdida termine matándolos mientras van o vuelven a trabajar y los cortes de luz en el alumbrado público por el robo de los focos de luz y el cableado de parte de estas dos familias.
–Yo trabajo a unas cuadras, me voy de noche y me han llamado para decirme 'mirá que están tirando, quedate ahí'. Aunque es a unas cuadras voy en el auto –contó un vecino.
–Se adueñaron de todo, están pasados de rosca –respondió otro.
Foto: Leonardo Carreño.
Intervención en Villa Española
El reclamo por la poca iluminación también llegó de parte de los trabajadores de UCOT, que son quienes transitan con las líneas 306 y 79 por la zona del conflicto.
"Donde está faltando la luz es frente a la casa del problema, del tiroteo. En esa cuadra, en este año, repusimos cuatro veces el alumbrado ahí y fue arrancado", dijo a El Observador el alcalde del Municipio D, Gabriel Velazco.
El Municipio D repondrá la iluminación en esa cuadra de Camino Corrales la semana próxima, cuando las cuadrillas vuelvan a trabajar en la zona, debido a que las tareas se suspendieron por los tiroteos que están ocurriendo en los últimos días.
–Hace años que tienen pica, pero como ahora nunca –dijo un comerciante. Entre los vecinos hay una mezcla de acostumbramiento y cansancio por el enfrentamiento entre los Suárez y los Albín.
Y, pese a que la Policía saturó la zona este miércoles, algunos son pesimistas sobre que algo cambie en Villa Española: "Esto no se va a terminar más. Porque esto es una parte. Desbaratan esto y aparece otra por otro lado. Para terminar con esto hay que tirar una bomba en el barrio y desaparecemos todos".