El equipo español se adelantó pronto, en el minuto 15, merced a un gol del colombiano Rafael Borré, pero, pese a acercarse con peligro en varias ocasiones a la meta local, la sensación de remontada nunca llegó.
El atacante sudamericano aprovechó un mal despeje de la zaga local para enganchar el balón dentro del área y ponerlo, mediante un fuerte disparo, en la escuadra de Alisson Ramsés.
Los amarillos se apropiaron entonces del esférico y llegaron a trenzar varias jugadas de cierto peligro, insuficientes para la tarea homérica que tenían delante: levantar una eliminatoria que ya quedó decidida en el Madrigal con la goleada de la Roma, comandada por un excelente Edin Dzeko, que firmó un triplete.
En la segunda parte, continuó el dominio amarillo, que los locales, dedicados a especular, consintieron.
El equipo italiano cedió la iniciativa buscando cerrar el partido a la contra, aunque el marcador ya no se movió.
También el Athlétic Bilbao quedó eliminado al perder en campo del Apoel Nicosia chipriota por 2-0, en partido de vuelta de dieciseisavos, pese a que el equipo vasco habían ganado en la ida por 3-2.
El conjunto español dominó la primera mitad, teniendo algunas ocasiones en las botas de Iñaki Williams y Beñat Etxebarria.
Pero en los primeros minutos de la segunda mitad, el Apoel logró sus dos goles por medio de Pieros Sotiriou (46), en un remate acrobático tras un centro desde la izquierda, y del griego Giannis Gianniotas (54), al anotar un penalti cometido sobre él mismo por Mikel Balenziaga.
En el minuto 50, los jugadores del Athlétic reclamaron un penalti por un presunto empujón a Raúl García en el área, que el árbitro no concedió.
En el minuto 65, el Apoel se quedó con diez jugadores por la expulsión de Pieros Sotiriou, autor del primer tanto del partido, tras ver la segunda tarjeta amarilla.
Pese a la superioridad numérica, el Athlétic no supo sacar ventaja de jugar con un hombre más en los últimos 25 minutos y el marcador ya no se movió.
El Athlétic también terminó con diez jugadores al ver la segunda amarilla el centrocampista Ander Iturraspe en el descuento (90+1).
El conjunto bilbaíno pagó el escaso acierto que tuvo de cara a portería en el primer partido, donde gozó de muchas ocasiones, mientras que los chipriotas rentabilizaron en aquel duelo de ida las pocas ocasiones que dispusieron.
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