"Es un caso inventado, yo no cobre ningún peaje ni cobre ninguna plata", dijo el ex presidente de la AUF.
El expresidente de la
Asociación Uruguaya de Fútbol (
AUF),
Wilmar Valdez, presentó este martes al mediodía una denuncia penal contra el Walter Alcántara, el empresario que grabó y difundió los audios que llevaron al dirigente a abandonar la titularidad del órgano rector del fútbol nacional y a renunciar a la campaña para su reelección.
Según contó el abogado de Valdez, Pablo Galain, la denuncia es porque "hay elementos" que muestran que Alcántara presionó para que el extitular de la AUF renunciara a su cargo.
Galain dijo que la Justicia deberá investigar "los motivos y quiénes están detrás, si hay algo orquestado o no", para que Valdez abandone al cargo que ostentaba hasta el pasado lunes 30 de julio. En aquella oportunidad, el ex titular de la AUF emitió un comunicado en el que aseguraba que la renuncia estaba motivada por "razones estrictamente familiares y personales", al tiempo que descartó "que haya existido cualquier presión indebida, amenaza o extorsión".
Sin embargo, su abogado explicó que aquel comunicado público fue redactado cuando estaba en "estado de shock" por la situación. Ahora Galain reconoció que no hubo razones familiares que justificaran su salida de la AUF, y que a Valdez "el paso del tiempo le hizo ver que realmente tenía que salir a defenderse, y que no podía quedar shockeado".
"Él (por Valdez) cumplía la función con más repercusión en este país después del presidente de la República, si lo están amenazando de determinados audios en los que habla de gente del gobierno cómo puede seguir adelante", explicó el abogado.
La denuncia se incorporará a la causa que lleva adelante la fiscal Silvia Pérez, en la que ya declararon Valdez, Alcantara, el abogado y presidente de Peñarol, Jorge Barrera, y el periodista, Julio Ríos.
El "caso inventado" de Alcántara
Valdez calificó de "rotunda falsedad" las declaraciones de Alcántara a El País sobre que en 2016 el entonces presidente de la AUF pidió una coima de US$ 35 mil, como pago por su intermediación en la renovación de la red lumínica del estadio Luis Franzini, una inversión que superó el millón de dólares y que recibió el aporte de US$ 200 mil por parte de Conmebol.