Ni las andanzas del jefe de seguridad presidencial Alejandro Astesiano, ni el pasaporte otorgado al narco Sebastián Marset, ni la condena por abuso sexual al senador Gustavo Penadés, ni la renuncia del presidente del directorio blanco, Pablo Iturralde, por la filtración de polémicos whatsapp.
Ninguno de esos espinosos asuntos que golpearon al gobierno de Luis Lacalle Pou parece alcanzar la magnitud del caso de corrupción en la Intendencia de Artigas que terminó con las condenas del intendente Pablo Caram, de la diputada Valentina Dos Santos y el director de Desarrollo Productivo de la comuna Rodolfo Caram, por el reparto irregular de horas extras.
A diferencia de aquellos episodios, la corrupción protagonizada por el clan Caram desató diferencias internas y un clima enrarecido dentro de un Partido Nacional que atravesó con dificultades las elecciones internas del 30 de junio y que se encamina a disputar el poder en la primera vuelta del próximo octubre.
Fuentes nacionalistas dijeron a El Observador que si bien la situación en Artigas era harto conocida desde hace tiempo, la sentencia judicial sorprendió a contrapié a una dirigencia que, mayormente, demoró en reaccionar y que lo hizo sin demasiada armonía en el tono, en las formas y en el contenido.
Llamativamente, los sectores que con más virulencia criticaron la actitud de los jerarcas artiguenses –integrantes de la lista 404 que encabeza el candidato presidencial Álvaro Delgado- fueron aquellos que apoyaron la precandidatura de Laura Raffo en las elecciones internas y que se sintieron dolidos por la decisión de Delgado designar a Valeria Ripoll como su compañera de fórmula.
El miércoles fue Alianza Nacional quien a través del senador Carlos Camy reclamó al directorio blanco que trasladara el tema a la comisión de ética. Lo hizo pocas horas antes de que Rodolfo Caram y Dos santos renunciaran al partido, y que Pablo Caram pidiera que su proceder fuera analizado por esa comisión.
Este lunes, durante su discurso en un homenaje a Luis Alberto de Herrera, el principal dirigente del Herrerismo, Luis Alberto Heber, protagonizó un encendido discurso en el que dijo que lo ocurrido “es una verdadera vergüenza” y afecta “el honor” de su partido.
“Ya no podremos decir que en este gobierno no hay un solo acto de corrupción. Se podrá decir que no es del gobierno nacional pero no es excusa, hay un hecho de corrupción en un gobierno del Partido Nacional en el departamento de Artigas. (A los dirigentes condenados) No los queremos en el Partido Nacional por la conducta que han tenido en estos años", argumentó.
Las palabras del herrerista fueron tuitiadas por el senador de la Lista 40 Sebastián Da Silva. “Clarito. Suscribo 1000 por ciento”, escribió el dirigente.
Minutos antes, con una notoria diferencia en el tono y el contenido, Delgado había anunciado a la prensa que le pidió a Pablo Caram que renunciara a la intendencia de Artigas y no se presentara como candidato al Parlamento como tenía previsto. También se mostró en desacuerdo con que Dos Santos asuma al frente de la comuna. De todas formas, este lunes la Corte Electoral desactivó esa posibilidad, inhabilitando a ambos dirigentes para ejercer cargos públicos.
“Hay un ambiente de gente que se quiere ir a las cuchillas contra los Caram”, dijo un operador blanco. “Hay un ambiente de gente que se quiere ir a las cuchillas contra los Caram”, dijo un operador blanco.
El jueves 18, Delgado había dicho que lo sucedido en la frontera le provocó un “sentimiento personal muy triste, amargo” y calificó de “irregularidad” lo cometido por sus correligionarios.
Lejos de la contundencia de las palabras de Heber y de la declaración emitida este lunes por el Comité Ejecutivo Nacional del Partido Colorado que repudió “los hechos delictivos” cometidos en Artigas y consideró “imprescindible que los demás integrantes de la coalición de gobierno "actúen con claridad y firmeza en la condena de actos que constituyen violaciones a la legislación anticorrupción vigente".
Fuentes nacionalistas expresaron su preocupación ante la posibilidad de que la condena de la mayoría de dirigentes del partido no alcance los decibeles de lo dicho por Heber o lo aprobado por el Partido Colorado.
“Hay un ambiente de gente que se quiere ir a las cuchillas contra los Caram”, dijo un operador blanco.
Todavía falta la palabra del presidente Luis Lacalle Pou quien ha evitado opinar sobre la corrupción en Artigas. Tal vez sea el líder nacionalista quien marque el rumbo del partido en la condena de este asunto fronteriza que acosa al Partido Nacional en plena lucha por permanecer en el poder.