Antes de asumir en la Intendencia de Montevideo, Mario Bergara reconoció que los números de la comuna eran "fuleros". "Partimos de una situación de una fuerte restricción financiera", dijo en el programa Sin piedad de VTV días antes de la asunción.
En entrevistas, Bergara ha responsabilizado principalmente al gobierno de Luis Lacalle Pou por la situación financiera de la comuna capitalina, bajo una presunta "discriminación" a Montevideo y Canelones. Pero en el gobierno departamental también prevalece la idea –según dijeron fuentes municipales a El Observador– de que el déficit de 2024 (ocho veces mayor al de 2023) se debe a que la intendencia recaudó menos dinero y gastó más.
En sus primeras semanas como intendente, Bergara le manifestó a la Asociación de Empleados y Obreros Municipales (Adeom) que se encontró una intendencia desordenada a nivel financiero y empezó a tomar medidas (por ejemplo, respecto a gastos en personal) que se desmarcan de la gestión de Carolina Cosse.
Por un lado, los cargos de confianza designados en la nueva administración, como los directores, tienen salarios más bajos que los de la administración anterior. Es decir, los grados SIR (la escala de sueldos de la intendencia) pasaron a ser más bajos, dijeron fuentes cercanas al intendente.
Por otra parte, el exministro de Economía bajó los sueldos de algunas gerencias, como la del Casino Municipal (una dependencia que ha dado pérdida los últimos años y que Bergara quiere pasar al gobierno nacional).
Tampoco renovó los pases en comisión de quienes trabajaban en otros organismos, pero recibían su sueldo por parte del gobierno departamental.
La intención de Bergara es que su administración tenga menos contrataciones directas que la anterior. Según había dicho a Desayunos Informales (Canal 12) el día después de asumir, preveía reducir unos 60, 70 contratos directos de un total de 300.
"Una casa bastante desorganizada"
Este martes, el nuevo intendente se reunió con Adeom y le transmitió que se encontró "una casa bastante desorganizada", contó la secretaria general del gremio, Silvia Tejera.
"La inquietud por parte del intendente de lo que es el panorama económico, que obviamente va a ser un limitante al momento de negociar el convenio colectivo", dijo Tejera en rueda de prensa. "En resumen, lo que nos trasladó el intendente es que se encontraron con una casa bastante desorganizada, que están poniendo las cosas en su lugar", añadió la secretaria general de Adeom.
Tejera dijo que Bergara se refirió al desorden respecto a la situación financiera, pero también a otros aspectos, como las contrataciones directas y a la falta de "organigramas".
"Él lo que nos decía de la multiplicidad de tareas que hay en la intendencia, que hay una falta en organigramas, que se quiera hacer un poco más de la información para poder tener una negociación y que sea seria", continuó Tejera.
Línea de crédito con el BROU
La intendencia pedirá una línea de crédito al Banco República (BROU) para asegurarse de tener dinero con el que pagar sus obligaciones. La directora de Recursos Financieros, Laura Tabárez, dijo que es una "medida provisoria".
“Capaz no la necesitamos, pero es bueno que esa herramienta esté porque si en algún momento la necesitamos", explicó a La Diaria.
Según una resolución publicada este jueves, la línea será de "hasta un doceavo del Presupuesto General anual de Sueldos y Gastos de Funcionamiento".
Asunción de Mario Bergara/Mario Bergara.
Foto: Leonardo Carreño
El texto dice que la intención es usar ese dinero "con destino a Acuerdo en Cuenta Corriente, Capital de Trabajo Inversión en Equipamiento y Apertura de Cartas de Crédito".
Para pedir esta línea de crédito, la intendencia necesitará la autorización de la Junta Departamental, pero como el plazo de repago que plantea no supera el actual periodo de gobierno, no necesita de mayoría especial (es decir, puede aprobarlo con los votos del Frente Amplio).