"Evidentemente estábamos siendo atacados", dijo el jefe de Policía de Montevideo, Mario D'Elía, al ser consultado sobre la represión denunciada por el sindicato de trabajadores de la pesca, que aseguran que fueron agredidos por los funcionarios mientras se manifestaban frente a la sede del Ministerio de Trabajo.
D'Elía dijo en una rueda de prensa convocada en el Ministerio del Interior para hablar sobre este tema que los policías pidieron a los manifestantes en reiteradas ocasiones que liberaran la calle para garantizar la circulación. En respuesta, según narró, los efectivos recibieron agresiones con "baldosas, botellas" y "pirotecnia".
"No hay otra solución que intentar colocarse primero en la línea de trabajo para cumplir la orden del jefe de operativo. Pero, a su vez, debimos tomar acciones porque evidentemente estábamos siendo atacados", afirmó.
Consultado sobre si estaba conforme con el operativo realizado, D'Elía dijo que se ajustó a protocolo y que fue "bien" ejecutado.
Agregó que un manifestante intentó agredir a un policía con un casco y que otros funcionarios recibieron "golpes" en sus escudos.
Primero la Policía realizó disparos de "estruendo" para disuadir a los manifestantes, pero como, según D'Elía, siguieron agrediendo a los efectivos dispararon "munición menos que letal" en un "ángulo de 45 grados" como disponen los protocolos.
El jerarca policial señaló que uno de los policías que participó en el operativo debió ser asistido en el Hospital Policial por los golpes que recibió, aunque no se detectó una fractura.
Respecto a las heridas que denunció públicamente tener el dirigente sindical Sergio Sommaruga, D'Elía respondió que los disparos que se hicieron fueron "en el marco de una agresión al personal policial".
"Evidentemente lo que pasó es que el personal no llegó a colocarse en su posición inicial para cumplir la orden de liberar la calle que ya fue agredida", sostuvo D'Elía, quien resaltó que pasó una hora antes de que llegara la unidad especializada y que en ese lapso hubo dos advertencias a los manifestantes.
Un manifestante fue detenido por los desmanes y cuando fue revisado los funcionarios encontraron drogas, agregó D'Elía. Y también se denunciaron daños a móviles policiales.
Los incidentes entre el sindicato pesquero y la Policía
La versión policial difiere de la que tienen los manifestantes y el Pit-Cnt, que apuntó en una declaración contra el gobierno por la "represión policial".
Para el Pit-Cnt la "manifestación pacífica es un derecho fundamental" que está protegido por la Constitución, pero la "violenta respuesta del gobierno a los legítimos reclamos de los tabajadores es inaceptable y atenta contra las libertades democráticas".
La central afirmó que el integrante del Secretariado Ejecutivo y dirigente del sindicato de trabajadores de la enseñanza privada, Sergio Sommaruga, fue herido por la policía, además de un trabajador de la prensa.
Y anunció que iniciará "acciones legales" por los hechos sucedidos.
Por su parte, Sommaruga dijo a El Observador que se realizó placas que no detectaron "lesiones intramusculares", pero que le quedó un "dolor intenso en la pierna". El dirigente sindical recibió disparos de munición no letal por parte de policías.
"Todavía no entiendo por qué me disparó cuando era evidente que estaba en una actitud totalmente pacífica", agregó. El Pit-Cnt sostiene que Sommaruga llegó al lugar para intentar calmar los ánimos y mediar entre las partes.
