El ministro del Interior, Nicolás Martinelli, viajó este domingo hacia Ecuador para participar de una nueva instancia del Comité Latinoamericano de Seguridad Interior (CLASI), donde las autoridades que encabezan las órbitas de seguridad de los diferentes países de la región se dan cita para fortalecer las estrategias contra el delito.
Fuentes de la secretaría de Estado confirmaron a El Observador que el director nacional de Policía del país anfitrión, César Zapata, se interesó en la baja de delitos que ha logrado Uruguay y solicitó reunirse con el ministro Martinelli.
Aunque todavía no se confirmó que el encuentro sea de carácter bilateral, sí se sabe que los jerarcas compartirán en la instancia.
No es la primera vez, en la administración liderada por el actual ministro, que países de la región se interesan en el know how uruguayo. Días atrás el Ministerio del Interior presentó novedades tecnológicas para combatir contra la delincuencia en el país como un nuevo sistema de seguimiento biométrico presente en dispositivos especiales que se le dará a los arrestados, algo que interesó a las autoridades de Paraguay, recordó la cartera en diálogo con El Observador. En este caso, destacaron que el planteo del BID tiene puntos de coincidencias con la estrategia de enfoque dual que lleva adelante el Ministerio del Interior.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) adoptó un nuevo enfoque para combatir la violencia criminal en la región, centrándose en trabajar con las poblaciones más vulnerables, fortalecer las instituciones y cortar los flujos financieros ilícitos. Ilan Goldfajn, presidente del BID, aborda estos desafíos y el apoyo que brindan, temas que se discutirán en la Cumbre Latinoamericana de Seguridad que se celebrará el 19 y 20 de agosto en Guayaquil.
El nuevo enfoque del BID se basa en fortalecer la capacidad del Estado, implementar programas de prevención de violencia en las poblaciones más vulnerables, y mejorar la seguridad y la justicia con el uso de análisis basados en datos y evidencias. La capacitación es fundamental, ya que sin las habilidades adecuadas, la tecnología más avanzada no sería útil. Además, el BID promueve el desarrollo de una nueva generación de científicos de datos y tecnología de vanguardia para enfrentar organizaciones criminales cada vez más sofisticadas.
En el Comité Latinoamericano de Seguridad Interior en Guayaquil, el BID, junto con el Gobierno de Ecuador, dialogará con delegaciones de 12 países, entre ellos Uruguay, sobre soluciones para enfrentar el crimen organizado. Durante la cumbre, se propondrá la creación de la Alianza para la Seguridad, la Justicia y el Desarrollo, que buscará ampliar la coordinación entre países, proveer financiamiento y asesoría técnica.
El BID también enfatiza la importancia de movilizar recursos para fortalecer los sistemas de justicia, asegurando que las autoridades no estén en desventaja frente a los delincuentes. Además, se involucrará a la sociedad civil y al sector privado para enfrentar este desafío de manera colectiva.
En cuanto al apoyo del BID en temas de seguridad, destacan intervenciones en Honduras, Brasil, Chile y Uruguay, donde se han logrado resultados significativos en la reducción de la violencia y la mejora de la confianza en las instituciones de seguridad.
El BID está actualizando los cálculos del costo del crimen en la región, estimando que en Ecuador este costo asciende al 4% del PIB. Este costo incluye pérdidas de capital humano, gastos en seguridad privada y pública, y afecta negativamente el crecimiento económico del país.
Finalmente, el BID está trabajando en la aprobación de un préstamo de $150 millones para Ecuador, destinado a programas de prevención del crimen organizado, fortalecimiento de la presencia del Estado en territorios vulnerables y mejora de la capacidad para investigar delitos.
Este programa representa el nuevo enfoque del BID para enfrentar el crimen organizado en la región, y se espera que pueda replicarse en otros países.
