De acuerdo a la presentación del balance, el grupo ANCAP -incluyendo subsidiarias- cerró su ejercicio 2017 con un resultado operativo positivo por US$ 71,5 millones, que fue contrarrestado por un perjuicio financiero de US$ 22 millones, e impuesto a la renta por US$ 10,5 millones. Así, terminó con un resultado para ese período de US$ 39 millones.
La petrolera estatal
ANCAP presentó este martes los resultados del balance 2017, que arrojó una ganancia por US$ 39 millones, más que duplicando así su utilidad de US$ 15 millones que había mostrado en el ejercicio anterior. Entre los ejercicios 2011 y 2015 la empresa acumuló pérdidas por unos US$ 800 millones. Esto llevó a que el Estado aprobara una millonaria capitalización por US$ 623 millones al arranque de 2016.
La división Portland cerró con un rojo de US$ 12 millones. El gerente general, Ignacio Horvath señaló que el negocio "está lejos de ser positivo", pero subrayó que la división recuperó el liderazgo en el mercado tras subir la producción 2% y logró una mejora sensible en sus costos de producción.
El margen Ebitda (resultado antes de impuestos, intereses, depreciaciones y amortizaciones) bajó de 10,3% a 7,4% en 2017 como consecuencia del impacto negativo que tuvo la parada de mantenimiento de la refinería.
Los ingresos de la petrolera estatal aumentaron 6,9%, pero el costo de sus ventas crecieron 18,6% como consecuencia de un aumento del precio internacional del crudo (+24%) y los mayores erogaciones que causó la parada de mantenimiento de la refinería por importaciones de combustibles y servicios asociados, explicó el gerente financiero del ente Gustavo Mayola.
Las empresas vinculadas al ente mostraron una mejora sensible ya que en ejercicio 2016 habían cerrado con un rojo de $ 381,8 millones (unos US$ 13,4 millones), mientras que 2017 registraron un positivo de 1,1 millones (unos US$ 400 mil).
Las ventas al mercado interno de ANCAP -excluyendo UTE-, crecieron 9,7% producto de un mayor volumen de naftas comercializadas (+4,7%) y de gasoil (+2,2%), mientras que el supergás disminuyó 5,9%.
La presidenta del ente, Marta Jara sostuvo que en general los números de la empresa "son alentadores" y destacó el impacto neutral de las colaterales en el balance. "Ducsa es el motor", reconoció. La distribuidora de combustibles del ente obtuvo ganancias por unos US$ 28 millones en el ejercicio 2017.
Por otro lado, dijo que el negocio de la cal fue positivo por primera vez, aunque dijo estar "preocupada"
por el parate en la planta de Portland de Minas. La producción está detenida hace dos meses debido a que el sindicato reclama el ingreso de más personal.
Deuda por casi US$ 1.100 milllones
En tanto, los números muestran que al cierre del año pasado la deuda del ANCAP y
ALUR ascendía a US$ 1.093 millones. Durante el año se cancelaron deudas por US$ 60 millones. El gerente financiero, Gustavo Mayola indicó que los ratios muestran "una mejora" del pasivo del ente petrolero por el reperfilamiento de deudas financieras de corto a largo plazo y la mejora en la calificación de Moody's a Ba2.
La nota negativa dentro de las subsidiarias del ente petrolero la dio la petroquímica Carboclor que el ente tiene en la vecina orilla. En 2017, esa empresa cerró con un rojo de 530,3 millones de pesos argentinos (unos US$ 32 millones al tipo de cambio promedio de ese año), su peor resultado operativo al menos desde 2003, y casi doblegado el rojo de US$ 18 millones del 2016. En el acumulado de los últimos cinco años las pérdidas de la subsidiaria del ente petrolero llegan a US$ 66,4 millones.
El equilibrio de las finanzas de ANCAP ha sido la prioridad desde que asumió el nuevo Directorio encabezado por su presidenta Marta Jara, aunque ello implicó que las tarifas de venta al público no reflejaran en su totalidad la caída que registró el precio internacional del crudo y un dólar planchado en los últimos dos años.
Protesta sindical
A poco de comenzar, la presentación fue interrumpida por una delegación del sindicato que al grito de "arriba los que luchan" irrumpió en el salón. La situación obligó a que la ministra de Industria, Carolina Cosse se levantara de su asiento y pidiera calma a los manifestantes.
Con el paso de los minutos, las aguas se calmaron y se pudo continuar con el acto oficial que encabezaban las autoridades de la empresa y representantes del Poder Ejecutivo.
ANCAP llamó a una licitación hace unos meses para contratar a una empresa privada que realice el transporte fluvial de combustibles entre la refinería de La Teja y los centros de distribución de Paysandú y Juan Lacaze. Esa medida es rechazada por el sindicato de funcionaros del ente. Ese servicio es desarrollado actualmente por el buque tanque ANCAP IX.
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