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Albion, el humilde pionero que se convirtió en SAD y quiere crecer en el fútbol profesional
(Nota publicada en Referí el 28 de mayo de 2020)
Leonardo Blanco siempre respiró el perfume futbolero francés. Hijo del Cacho (Juan Carlos) Blanco compartió sobremesas de los mundiales senior que se organizaban en Brasil con el nombre de Copa Pelé a fines de la década de 1980. Ahí escuchaba a Juan Martín Mugica, Héctor Resola y Carlos Curbelo -todos con pasado en el fútbol galo- hablando de dónde salieron los Michel Platini, Alain Giresse, Dominique Rocheteau o Jean Tigana, la maravillosa generación francesa que conquistó Europa en 1984. "Ellos insistían que la clave de todo eran los centros de formación y esa idea fue entrando en mi cabeza". Tanto fue así que en Albion, club en el que desembarcó en 2013, empezó a ejecutar esas ideas para darle forma a su proyecto deportivo propio.
Entre 1989 y 1991, como parte de una carrera futbolística de corto vuelo, Blanco tuvo una experiencia semiprofesional en Francia y pudo ver de primera mano un modelo de trabajo que se mantuvo en el tiempo. "En Francia, que es un país muy grande, empezaron a hacer esos centros de formación porque les era difícil hacer el scouting y para poder así trabajar en la formación. Elaboraron un plan en el que los clubes tienen e esos centros residencias para sus jugadores donde les dan alimentación y formación no solo deportiva sino también académica; el femenino también lo desarrollaron bajo ese modelo", contó Blanco a Referí.
En 1994, tras colgar los botines, comenzó su carrera como entrenador. Pasó por las juveniles de Miramar Misiones, Racing, Uruguay Montevideo, Rampla Juniors y Huracán Buceo hasta que en 2012 fue ayudante de Darlyn Gayol en Central Español. Ascendieron al palermitano a Primera pero a mediados de 2013 dieron un paso al costado. Ahí se le volvió a cruzar Albion por su camino, club por el que había tenido un pasaje cuando era un juvenil, en 1985, mientras jugaba paralelamente en Nacional Universitario.
"No había nada, el club ni siquiera iba a competir en la temporada 2013-2014", recordó. A Albion lo manejaba la familia Chainca, a través de los hermanos Fernando y Marcelo. El primero había sido tesorero de Nacional en la época de Ceferino Rodríguez.
Nacional Universitario 1983-1985
Albion 1985 (divisional C)
Nacional 1986-1987 (Cuarta División)
El Tanque Sisley 1988 (divisional B, lo dirigió Miguel Ángel Piazza)
Charli Samoi 1989-1990 (equipo regional francés)
Filial de Lille 1990-1991
El Tanque Sisley 1991 (en la A) y 1992 (en la B)
San Salvador de dolores 1993 (OFI)
Libertad de Cañada del Nieto 1993 (OFI)
Selección de Soriano 1993 (OFI, lo dirigió José Sasía)
Colón 1994 (divisional B, lo dirigió Roberto Robaina)
Desde 1993 Trouville en Liga Universitaria
Albion y Nacional tienen un ligamen histórico. "Esa relación mantuvo vivo a Albion, pero al mismo tiempo le impidió crecer. El único interés de Nacional en Albion es tener el decanato para que no lo tenga Peñarol", dijo Blanco. Incluso la sede de Albion estuvo hasta hace unos años en el edificio de 8 de Octubre de los tricolores.
Albion fue fundado el 1° de junio de 1891, antes que el CURCC, que es del 28 de setiembre del mismo año y que en 1913 cambió su nombre a Peñarol. Para Nacional -fundado el 14 de mayo de 1899-, CURCC y Peñarol son entidades distintas y por eso los grandes del fútbol uruguayo reivindican para sí la condición de ser el decano del fútbol uruguayo.
"Cada uno tiene sus argumentos, pero nosotros estamos por fuera de esa discusión. El término 'decano' lo hemos dejado de lado porque utilizamos el de 'pioneros'. Hace tres años se comunicó con nosotros el Sheffield United y nos incluyó en el selecto Club de los Pioneros, entre los primeros clubes nacidos en cada país". Ni Peñarol ni Nacional. El que representa a Uruguay es Albion y ahí se codea con otros históricos como Recreativo Huelva (España), Genoa (Italia), Santiago Wanderers (Chile), BFC Germania 1888 (Alemania) o Royal Antwerp (Bélgica).
$ 2.000 por partido ganado
Maximiliano Ohaco, delantero devenido en lateral, estaba entonces en Albion y se mantiene hasta el día de hoy: "El crecimiento del club fue increíble, ahora pasa por un momento bueno en lo institucional, pero también tuvo de los otros. Estuvimos dos años sin poder jugar en la C uno de ellos luego haber entrenado siete meses. Cuando entrenábamos en el Parque Huracán, Leonardo se encargaba hasta de prender la caldera para que tuviéramos agua caliente para bañarnos", reveló a Referí.
"Es cierto", ratifica Blanco. "Llegué como entrenador pero era equipier, gerente, delegado... Hacía todo".
Ohaco y Tabaré Da Cunha, zaguero, son los únicos que siguieron en el equipo tras el histórico ascenso de 2017 cuando el dirigidos por Ignacio Veiga lograron por primera vez en la historia el ascenso a la Segunda División Profesional.
Los dos trabajan en el rubro gastronómico como encargados de restoranes. Entrenan de mañana, descansan y trabajan desde la hora 18. Son los únicos del plantel con dos trabajos.
"Al principio iba a entrenar en bicicleta. Nos pagaban $ 2.500 por partido ganado y con el tiempo a algunos nos pagaban un viático de $ 4.000. Así junté unos pesitos y me compré una motito. Pero una tarde, a la salida del Parque Huracán, me salieron al cruce, me encañonaron y me la robaron. Hice la denuncia y me tuve que bancar que la Policía me tomara el pelo. Pero el canchero Luis se movió y me la consiguió a los tres días", contó Ohaco.
La histórica cancha de Albion, el Parque Enrique Falco Lichtenberger que está al lado del Parque Huracán, quedó abandonada. "La zona estuvo muy peligrosa por años. Ahora ha mejorado, pero ya no es posible recuperarla", confesó Blanco.
Por aquellos tiempos, la madre de Da Cunha puso un lavadero y los jugadores ponían de a $ 30 por cabeza para lavar sus propias camisetas.
"En los primeros años Nelson Corrales me dio una mano para todo y su familia siempre estuvo al pie del cañón cuando él lamentablemente falleció. Pero mi idea siempre fue transformar al club", rememoró Blanco que tras dirigir tres años, en junio de 2016, firmó un acuerdo para transformar a Albion en sociedad anónima deportiva (SAD) y se convirtió en la cabeza del proyecto institucional delegando la conducción del equipo.
Mejora de las condiciones y ascenso
"Primero preparamos el terreno con el club saneado y una vez que la sociedad anónima fue aprobada por la AUF salí a buscar inversionistas. A fines de ese año hicimos una primera venta de acciones y en 2017 logramos el ascenso entre 15 clubes en una división muy compleja donde todo se empareja para abajo".
Ya en la C, el equipo había empezado a entrenar en Carrasco Polo y a hacerse cargo de la lavandería y los viáticos para sus futbolistas. La dura realidad del amateurismo comenzaba a cambiar.
Con Gabriel Corral como DT, el equipo sostuvo la categoría en 2018 luchando hasta la última fecha. En 2019, con Federico Nieves de DT (Corral pasó a ser el coordinador del primer equipo y el nexo con los juveniles), peleó hasta el final para acceder a los playoffs, algo que no pudo conseguir. Este año apostaron por Ignacio Ordóñez, exayudante de Julio Comesaña que dirigió a Cerrito el año pasado, con el objetivo de crecer.
"Es un club que me sorprendió por las comodidades que nos dan. Los jugadores fueron a seguro de paro en la pandemia, pero el club les paga los complementos. Tuvimos una preparación muy buena, arrancamos en los primeros días de febrero. Albion está ordenado, sin deudas y su objetivo para esta temporada es estar de mitad de tabla para arriba", Ignacio Ordóñez.
Blanco acotó: "Veníamos preparando muy bien las temporadas en primera y juveniles. Queremos subir en juveniles a la A y en Primera entrar a los playoffs; eso sería una buena temporada, aunque ahora no sabés con lo que te vas a encontrar después de la pandemia, es una incertidumbre".
El equipo es capitaneado por Federico Velázquez, cuenta con el colombiano César Taján en sus filas y para este año se reforzó con el argentino Juan Fiore y los ex Cerrito Cristian Yeladian -de larga experiencia- y Mathías López, ex El Tanque Sisley.
La transformación
Además de convertise en SAD, Albion cambió un mundo desde aquel 2013 en el que Blanco llegó al club. "Teníamos un solo jugador fichado en mayores y no había juveniles. Al día de hoy han pasado 300 jugadores por la primera del club y competimos en las cinco categorías en juveniles. Pero además sumamos fútbol femenino, fútbol playa, fútbol virtual y una captación que trabaja en paralelo con una academia a la que asisten chicos que no tienen nivel para llegar a juveniles o que simplemente toman el fútbol como un espacio recreativo".
El club firmó nueve contratos con juveniles. Uno de ellos es Nicolás Bernatene, golero que fue negociado a Nacional quedándose Albion con un porcentaje de su ficha. Otro es Felipe Caiús, volante que está cedido a préstamo y juega en la Tercera de Nacional. Ambos disputaron este año la Libertadores sub 20 en Paraguay.
"Queremos seguir fortaleciendo la marca, tender puentes en el Club de los Pioneros y apuntar al proyecto académico que es lo que nos quita el sueño para poder así alinear un proyecto de residencia, educativo, y que funcione en el club", dijo Blanco.
"Es todo un desafío llegar al presupuesto", dice Blanco. El mismo ronda los US$ 35 mil a US$ 40 mil por mes. Los ingresos por derechos de televisión no llegan a US$ 9.000. "Hay una diferencia real de un 60% que tenemos que generar para cubrir el presupuesto y nosotros apostamos a que esa diferencia sea captando inversores, porque eso fortalece al club".
Albion era solo un nombre. Tan histórico como vacío. Pero después de dormir durante más de un siglo por fin ha despertado para escribir su propia historia.
