Apicultores ávidos por mejorar aspectos de manejo de las colmenas y su sanidad

El manejo sanitario de la colmena, para solucionar principalmente los perjuicios que causan la varroasis y la nosemosis, y la necesidad de seguir avanzando en aspectos de manejo, como la nutrición, para mejorar la sanidad, calidad, vida y productividad de la colmena, son dos grandes temas que preocupan a los apicultores, según se apreció en una jornada de trabajo sobre el sector organizada por el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) en La Estanzuela, en Colonia, el sábado pasado y con la asistencia de más de 250 productores.

“La apicultura nacional se dio cita en La Estanzuela”, destacó el ingeniero agrónomo Ernesto Restaino, responsable de la Unidad de Comunicación de dicha estación experimental, quien precisó que la actividad se realizó en el marco de los 100 años del inició de las investigaciones agrícolas y que uno de los factores que facilitó la importante asistencia fue realizar la jornada un sábado, atendiendo reclamos de productores apícolas, quienes en muchos casos tienen otro trabajo principal y la apicultura como complemento.

Restaino señaló que durante la mañana sesionó el Grupo de Trabajo de Apicultura, integrado por apicultores e instituciones de referencia en el sector, con el objetivo de lograr una puesta a punto sobre el avance de los trabajos de investigación que se vienen llevando a cabo por el INIA, institución que además pudo indagar a este grupo de informantes calificados sobre la vigencia de problemas priorizados un par de años atrás, o la eventualidad de nuevas líneas de trabajo y problemas que deban atacarse desde la investigación.

En ese tramo de la jornada se remarcó la perjudicial incidencia de dos enfermedades, la varroasis y la nosemosis, para la apicultura nacional. El manejo sanitario de la colmena sigue siendo la principal prioridad sobre la que los apicultores reclaman mayor conocimiento técnico para su control. Es un tema que reúne varios aspectos, tanto desde el punto de vista del conocimiento propio de la enfermedad, como de la reglamentación de productos para el control de estas enfermedades, la difusión de resultados alentadores desde la investigación y el control de la calidad los productos de la colmena para que estos puedan seguir ingresando a mercados exigentes de exportación.

Hubo además un segundo tema de demanda, que se centró en la necesidad de seguir avanzando en aspectos de manejo, como la nutrición, que permita mejorar la sanidad, calidad, vida y productividad de la colmena, indicó el profesional.

Añadió que durante la tarde hubo una jornada de divulgación abierta y gratuita en la que se presentaron, en una sala Centenario completa, novedades en cuanto al uso de probióticos en abejas para la mejora de la nutrición como estrategias para la salud de las colmenas, novedades en cuanto al uso del ácido oxálico para el control de la varroa y la problemática de la apicultura en montes de eucaliptus, como principales temas de manejo.

Se valoró especialmente el aporte del reconocido técnico español Antonio Gómez Pajuelo, analizando en dos ponencias el efecto que tiene en la abeja el uso de ceras contaminadas con agroquímicos y la situación mundial en cuanto al uso de los principales agroquímicos y su incidencia en la apicultura.

Salas de extracción

Durante esta jornada, además, por parte del DILAVE se analizó la normativa vigente en cuanto a salas de extracción.

Al respecto, en los años 2013 y 2014, en las inspecciones oficiales (430 visitas) realizadas, un 67% de las observaciones efectuadas a las salas de extracción de miel correspondieron a problemas de índole organizativo del trabajo o a procesos de trabajo, y solo un 33% de las mismas correspondieron a aspectos de instalaciones o estructurales.

Restaino reflexionó que “esto demuestra que es posible mejorar con organización y planificación en la mayoría de los casos”.