El gobierno argentino decidió hacer su movimiento en el pesado tema de la deuda, en la presunción de que la crisis de los mercados globales le jugara a favor. Es por eso que presentó una oferta para reestructurar la deuda, que implica una fuerte pérdida de valor para los acreedores. En las últimas semanas hubo una intensa especulación en el sentido de si finalmente el ministro de economía, Martín Guzmán, concretaría la anunciada propuesta de canje o si, como algunos empezaban a aconsejar, iba a un default o, por lo menos, pedía “freezar” las negociaciones por un año.
Esta nota es exclusiva para suscriptores.
Accedé ahora y sin límites a toda la información.
¿Ya sos suscriptor?
iniciá sesión aquí
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá