El rector de la Universidad de la República (Udelar), Rodrigo Arim, aseguró este lunes que "se viven horas preocupantes" para la institución que dirige. El motivo es la definición que la coalición de gobierno hizo de la Rendición de Cuentas que se traducirá en una merma significativa de recursos para esa entidad educativa.
En un largo escrito divulgado por la canales oficiales de la Universidad, Arim dijo que el mensaje original del Poder Ejecutivo representaba una reducción de $ 600 millones en inversiones y gastos para la Universidad que, a diferencia de otros entes vinculados a la educación, no fueron convocados para una discusión previa. En ese marco, el Hospital de Clínicas sería el único prestador público de salud que no recibiría recursos adicionales para los próximos años.
Allí valoró que la apertura del debate en la Cámara de Diputados había generado un escenario más optimista. Todas las bancadas parlamentarias habían mostrado vocación de atender los reclamos, sobre todo en un tema fundamental: no avanzar en la derogación del impuesto adicional al Fondo de Solidaridad sin que mediara un resarcimiento completo a la Universidad por el dinero que iría a perder por esa vía.
La fórmula acordada finalmente por los legisladores de la coalición de gobierno va por mantener el cronograma de derogación del impuesto y compensarle solo la pérdida del primer año de recaudación, equivalente al 25% del total. Lo que pase en el resto del período es una incógnita.
Arim saludó como una "buena noticia" que la Rendición de Cuentas prevea una partida incremental para sostener una serie de programas del Hospital de Clínicas que, de todas formas, "no se puede equiparar" a la pérdida del adicional. Además, agregó, el mecanismo dispuesto para este incremento afecta la autonomía universitaria al "descansar en la voluntad discrecional del Poder Ejecutivo" y en la presencia de utilidades de otra entidad estatal. Se refiere el Banco República, que será el origen de esa "compensación".
"La Udelar no defiende el diseño actual del fondo", aclaró Arim. Por lo tanto, no objeta en sí su eliminación. Sí señaló que los recursos que por esa vía se obtenían son claves e imprescindibles para sostener "estrategias de democratización del conocimiento avanzado y descentralización" de esa casa de estudios fuera del área metrolitana. Así, en su escrito, Arim subrayó la importancia de "ser transparentes" hacia la población sobre las pérdidas que afronta ahora la Universidad.
El rector afirmó que, aún con la "compensación" prevista en la Rendición, la Universidad perderá $ 7 millones en 2023. Además proyectó que, sin cambios en la situación en los póximos años, la merma presupuestal será sustancialmente mayor. Arim calcula que en 2024 la Udelar perderá $ 157 millones, que serán $ 307 millones en el año siguiente y que llegarán a los $ 457 millones en 2024.
Será "un tiro en la línea de flotación" en la estrategia universitaria de desarrollo en todo el país, afirmó. La Universidad, aseguró, no podrá afrontar muchas de las obras que ya tenía definidas. Por otra parte, "será imposible soñar en nuevas concreciones".
Arim aseguró que de votarse el mecanismo previsto la casa de estudios quedará sin el único instrumento previsible que le permite realizar una planificación financiera de largo plazo de sus obras. Al ser de libre disponibilidad, puede elegir en qué momento ejecutarlos.
Además criticó que la "compensación no será preceptiva al quedar a discreción del Poder Ejecutivo y depender de la disponilidad del Banco República.
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