La árbitra Claudia Umpiérrez dirigió este sábado su primer partido a un equipo grande desde que está en Primera división.
Lo hizo en el Estadio Artigas de Las Piedras entre el local Juventud y Peñarol en el empate 1-1 y su trabajo fue más que satisfactorio.
Umpiérrez no mostró fisuras en el arbitraje, sacó tarjetas amarillas cuando lo tuvo que hacer, no dejó que Walter Gargano le hablara más y lo amonestó, dejó jugar con libertad y sin parar el juego innecesariamente.
De esa manera, su trabajo fue muy bueno y sin errores.
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