En un momento de la tarde de miércoles, Mexico y Polonia empataban en todo. Puntos, diferencia de goles, goles a favor, resultado entre sí. Lo que estaba clasificando a octavos de final a Polonia era el Fair Play dado que tenía menos tarjetas amarillas que México.
Cuando Argentina-Polonia estaba 2 a 0 y México le ganaba a Arabia por el mismo marcador, ambos quedaban con cuatro puntos, y una diferencia de goles de 0. A su vez tenían dos goles a favor cada uno, dado que los polacos le ganaron 2 a 0 a Arabia Saudita y México estaba haciendo lo mismo.
El siguiente ítem que cuenta es el resultado entre sí, que terminó 0 a 0 con un penal atajado por el mexicano Guillermo Ochoa a Robert Lewandoski.
Por cada tarjeta amarilla se resta 1 punto, por segunda tarjeta amarilla que deriva en una tarjeta roja -3 puntos, por tarjeta roja directa -4, y por tarjeta amarilla y roja directa -5 puntos.
México terminó con siete tarjetas amarillas acumuladas en los tres partidos, mientras que Polonia tenía cuatro.
Finalmente, el gol del descuento de Arabia Saudita hizo pesar la diferencia de goles de cada uno.
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