Los conflictos entre criminales o por drogas, se cobraron cuatro nuevas víctimas este fin de semana. Al asesinato de dos jóvenes (de 26 y 28 años) en medio de un tiroteo en la rambla del Buceo –cerca del museo Oceanográfico- el sábado de madrugada, se le sumaron los homicidios de un hombre de 30 años y el de un joven de 19, que según pudo saber El Observador la Policía también investiga como posibles ajustes de cuentas.
El hombre de 30 años fue asesinado a balazos en el cruce de Camino Anaya y avenida Luis Batlle Berres cuando caminaba con otra persona en la tarde del sábado, una moto con dos personas les cortó el paso y uno de ellos sacó un arma y le disparó varias veces. La Jefatura de Policía de Montevideo informó que el atacante "no medió palabra" con el hombre asesinado, le disparó y tanto él como su cómplice fugaron. Fue trasladado por un patrullero a un centro de salud, donde murió. Tenía dos antecedentes penales, el último por homicidio.
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Horas más tarde, en la madrugada de este domingo, un joven de 19 años salió de su casa –ubicada en el cruce de Juan José Castro y Espronceda- y vio a dos personas paradas, una de ellas sobre una moto. Al verlo salir, le dispararon y el joven cayó al piso, informó en un comunicado la Jefatura de Montevideo. Según la información policial, antes de fugar le dispararon también a otro hombre que se encontraba con el joven, pero no lo hirieron. Un patrullero trasladó al adolescente de 19 años a un hospital y allí murió. La Policía Científica trabajó en el lugar e incautó un proyectil.
Apenas comenzaba el fin de semana cuando en la madrugada del sábado seis personas fueron atacadas a balazos en el auto en el que viajaban en la rambla de Buceo, informó Subrayado y confirmó El Observador. Fueron unos 26 disparos que tuvieron como consecuencia la muerte de dos hombres, uno de ellos un narcotraficante que lideraba un grupo que comenzaba a disputarse el mercado de la droga en el barrio 40 semanas con otros bandos de la zona. Otro de los ocupantes también murió y pertenecía a ese grupo que estaba en ascenso, según supo El Observador.
En el auto también viajaba otro joven que está detenido y tres mujeres de 17 y 18 años que no pertenecían al grupo criminal pero solían participar de fiestas organizadas por los líderes del grupo narco. Una de esas mujeres está internada grave.
Este caso es investigado como un conflicto por el mercado de la droga, en el que tener el control del territorio es la base para pensar en el éxito.
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