Da Silveira dijo que es "insólito" el conflicto en el IAVA y Silva que hay una "negativa tenaz" de los estudiantes

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"Este es un caso de privatización con la particularidad de que, a diferencia de las privatizaciones que se hicieron en otra época, acá no se paga. Hay un grupo de estudiantes que se declaró dueño de una zona de un edificio educativo", afirmó el ministro en rueda de prensa desde Colonia. 

Da Silveira consideró "insólito" que se esté frente un "problema gremial" ante algo "tan razonable" como lo que intentó hacer Secundaria, que explicó consiste en recuperar el salón asignado al gremio estudiantil para habilitar allí un ingreso con rampa por la calle Eduardo Acevedo. "Respaldo totalmente lo que hizo Secundaria", agregó el ministro. 

Silva, por su parte, explicó que el conflicto en el liceo se desató antes de Semana de Turismo. "La Dirección General de Educación Secundaria quería habilitar un ingreso que ya estaba clausurado hace tiempo por la calle Eduardo Acevedo y además hacerle una rampa para accesibilidad de las personas con discapacidad", dijo.

Pero el gremio impidió la entrada al local, según dijo el presidente del Codicen. "Se encontró también un espacio dentro del IAVA al cual no se podía acceder, estaba trancado y vandalizado", agregó Silva.

El presidente de la ANEP también respaldó la decisión de Secundaria. "Enterado de que hay un espacio publico en un liceo patrimonio histórico en la situación que está, no me caben dudas: hay que recuperarlo", sentenció.

Más temprano, desde la Expo Melilla, Silva había dicho que los estudiantes mostraron una "negativa tenaz" de encontrar otro salón en el que realizar sus actividades gremiales.

El conflicto en el liceo se desató luego de que Secundaria solicitara al director Ruidíaz mediar con el gremio estudiantil para que entregara el salón que tenían asignado para realizar sus actividades gremiales (algo establecido desde hace años). La intención de Secundaria era recuperar ese espacio, que aseguran en realidad es un acceso a otra parte del edificio, para instalar una rampa y solucionar uno de los reclamos de los estudiantes, vinculado a la rotura del ascensor, que no garantiza la accesibilidad para las personas discapacitadas. 

"Se les ofreció otro espacio. Lo que hubo es una negativa tenaz de los estudiantes de encontrar otro espacio para ir. En definitiva, esas radicalizaciones no hacen bien", sostuvo el presidente del Codicen.