Defensa de Peirano Basso denunció ante Paraguay "ilícito internacional" por imputarle nuevos delitos

El defensor de Peirano, Pablo Donnangelo dijo a El Observador que se está ante un “ilícito internacional” y que el hecho es muy grave. El penalista presentó dos escritos ante la Justicia para que a través de la Cancillería sean denunciados ante el gobierno de Paraguay.

El tratado de extradición entre ambos países establece que el ciudadano que es entregado para ser juzgado sólo podrá ser imputados por los delitos por los que se lo entrega. y no por otros (principio de especialidad). Sin embargo, en este caso en las dos causas que Peirano Basso tenía abiertas en Paraguay los jueces le imputaron por más delitos de los comprendidos en la extradición. 

En una de esas causas, que es la del Fondo de Inversiones Guaraní, la jueza le imputó además del delito de lesión de confianza, tres delitos más, y en la segunda causa que es propiamente la del Banco Alemán el juez le imputó además de los delitos de lesión de confianza, conducta indebida en situaciones de crisis y estafa, otros dos delitos que no estaban comprendidos en el pedido de extradición.

Según planteó Donnángelo en el escrito que presentó, el principio de especialidad, regulado en el artículo 249 del Código del Proceso Penal "ejerce una función de garantía tanto para el extraditable como para el Estado requerido en cuanto a que el requirente cumplirá fielmente con la sentencia de extradición" y la inobservancia de este principio implica un doble incumplimiento de una gravedad inusitada". Por un lado, sostiene, se incumple la sentencia y por otro se incumple con el derecho internacional.

Donnángelo planteó que si Paraguay no corrige esta situación se expone a ser sancionado internacionalmente por el incumplimiento y señaló que Uruguay podría pedir la repatriación del ciudadano uruguayo.

El abogado de Peirano en Paraguay, Guillermo Duarte Cacavelos también presentó un recurso en su país planteando el incumplimiento de la sentencia de extradición. Duarte declaró a un programa televisivo de ABC que “este caso va a poner en la vitrina internacional la mala praxis de la aplicación de la prisión preventiva en Paraguay”. El abogado explicó que a Peirano “se lo extraditó por un hecho punible y expresamente Uruguay dijo” que por otras conductas no lo pueden juzgar en Paraguay y “la jueza de garantía número1 le dictó prisión preventiva por hechos punibles que Uruguay no autorizó. Con su resolución desconoció el tratado”, afirmó y agregó que lo mismo hizo el juez de garantía número 4.

Protección a la integridad

Por otro lado, Donnángelo planteó que Paraguay también incumple la orden que dio la Justicia uruguaya de proteger la integridad física del imputado porque dispuso que después de 20 días sea recluido en la cárcel de Tacumbu, que es de las peores cárceles de América Latina.

"En esa cárcel las torturas y los tratos inhumanos son cotidianos, es una cárcel que el Mecanismo de Prevención de la Tortura recomendó cerrar”, señaló el abogado. En el escrito planteó que enviar a Peirano Basso a esa cárcel "es equivalente a someterlo a tratos crueles, inhumanos y degradantes que es posible desemboque en la violación a su derecho a la vida".

"Existe riesgo de vida de mi defendido y nuestro país posee la obligación de evitarlo", afirmó.