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El clima en Estados Unidos le da algo de soporte a los precios en Chicago
En Chicago los precios de los granos tuvieron algo de soporte por condiciones climáticas relativamente adversas en Estados Unidos, lo que puede llegar a incidir en la siembra de 2019. En ese escenario, además que todavía es muy temprano, el balance de oferta y demanda global sigue generando un marco bajista para los precios.
En la soja sigue se multiplican las especulaciones sobre cuándo se podría firmar un acuerdo entre China y Estados Unidos.
Y especialmente se especula sobre cuál podría ser el tenor de ese acuerdo.
Mientras sigue negociando, China compra algo a través de sus empresas estatales de soja estadounidense, pero se sigue asegurando la oferta brasileña.
En China, además, el impacto de la fiebre denominada gripe porcina incide en la demanda de raciones y de soja, aunque implicará una mayor importación de carne tanto de cerdo como de vacuno.
Lo que ha movido algo al mercado en los últimos días son los excesos de lluvias que se dieron en algunas regiones del medioeste estadounidense.
Si bien es todavía temprano y los productores tienen una gran capacidad de siembra, las inundaciones y fuertes lluvias podrían demorar el avance inicial de la siembra.
Esto afectaría más al maíz que la soja, porque el cereal se implanta antes que la oleaginosa.
La cosecha argentina llega en las próximas semanas con una producción que se acercará a los 55 millones de toneladas de soja.
Para Uruguay las estimaciones que manejan en el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca apuntan a un producción entre 2,6 millones a 2,7 millones de toneladas de la oleaginosa.
Mientras tanto, los valores siguen deprimidos con precios sobre US$ 310 a US$ 315 por tonelada, base acopio en Nueva Palmira, sin que logren mejorar.
Con un muy bajo porcentaje cerrado en precio o en primas (diferencia respecto a Chicago), por el momento son limitados los negocios cerrados de soja con el exterior.
Las especulaciones están en las estrategias que plantearan exportadoras y empresas para que los productores “fijen” negocios aunque sea en primas.
En algunos casos se estima que puede ingresar un fuerte volumen de cosecha, con poco movimiento de barcos lo que pegará sobre la logística.
En cultivos de invierno ya se definieron los planes de cebada con las malterías proyectando, una estabilidad del área respecto a la zafra pasada.
Se espera también por los planes comerciales de colza, con previsiones sobre un incremento en la superficie de esta oleaginosa de invierno.
