El Congreso del Partido Comunista de China dará un tercer mandato al actual presidente

El congreso reúne a unos 2.000 dirigentes del país con más habitantes de la Tierra, unos 1.400 millones, convertido en la segunda potencia económica del planeta acompañado de la mayor tasa de crecimiento de su producto interno. Todas las previsiones indican que podría convertirse en la primera economía mundial en menos de dos décadas.

En esas pocas cifras están algunas de las claves de por qué resulta importante el encuentro del máximo organismo de decisión del Partido Comunista de China que durará una semana. El congreso partidario se realiza cada cinco años y no solo observa la marcha de los planes quinquenales sino que también elige a los 200 miembros del Comité Central y al Buró Político, de 25 integrantes.

A su vez, el congreso elige al secretario general del partido, cargo que ostenta Xi Jinping desde hace una década.

En efecto, el actual presidente está al frente del PCC desde noviembre de 2012 y cuatro meses después asumía como presidente de la Nación. A punto de cumplir una década en el poder, el congreso del PCC le dará el aval para estar cinco años más al frente del país.

El crecimiento de la economía doméstica, el avance en innovaciones tecnológicas y patentamiento de marcas no son los únicos logros ostentados en esta década. China logró una reducción importante de la pobreza, puso en marcha la reconversión energética hacia energías limpias y logró aumentar las inversiones de empresas europeas y norteamericanas. En su región, tiene estrechos vínculos con la quincena de países que forman la Asociación de Naciones del Asia Sudoriental (ASEAN) y conformó la Organización de Cooperación de Shanghái, con Rusia, India, Irán y otras naciones.

Otra muestra de su expansión global es el impulso de la Franja y la Ruta de la Seda, que incluye transporte ferroviario y marítimo entre los puertos del Pacífico, en el Lejano Oriente ruso y chino con los puertos marítimos en Europa. Esa “Ruta” es la llave que le permitió a China sumar tratados de libre comercio y la adhesión de naciones de todo el planeta.

El actual escenario, de confinamientos obligatorios en algunas provincias por la Covid-19, así como las tensiones con Taiwán y el mayor enfrentamiento con Estados Unidos, no parecen ser obstáculos para que en algo más de un mes Xi Jinping se convierta en el líder comunista con mayor permanencia en el poder después de Mao Tse Tung, quien condujo la revolución que lo llevó al poder desde 1949 hasta su muerte en 1976.

Quién ex Xi Jinping

Xi Jinping​ nació en Baijing en 1953. Su padre fue parte de las fuerzas militares del Ejército Popular Chino que pelearon en el norte del país contra las fuerzas del Kuomintang, el partido nacionalista derrotado en 1949 y cuyos miembros, diezmados tras la derrota, encontraron en Taiwán un lugar donde establecerse.

Siendo joven, entre 1969 y 1975, Xi Jinping fue enviado a trabajar al campo, en la provincia de Shaanxi, en el centro del país. En 1974, a los 21 años, se afilió al PCC. A su regreso estudió Ingeniería Química en la Universidad Tsinghua, en Beijing.

Su carrera política tiene un punto de crecimiento cuando en marzo de 2007 fue nombrado secretario del PCCh en Shanghái, la ciudad más populosa, con el puerto más importante y centro financiero principal de China.

A los pocos meses logró su integración al Comité Permanente del Buró Político del Comité Central del PCC.​ Desde entonces hasta noviembre de 2012, su ascenso le permitió llegar a la presidencia del país, la que será ratificada dentro de algo más de un mes por cinco años más merced a una reforma constitucional de 2018 que votó a favor de no limitar los mandatos presidenciales a dos términos como hasta entonces.