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El gobierno de Nicaragua cerró la orden de los frailes franciscanos y 16 oenegés
El gobierno de Nicaragua canceló la personería jurídica y confiscó bienes de la orden de los Frailes Menores Franciscanos y de 16 oenegés, algunas ligadas a las iglesias católicas y evangélicas, argumentando como hizo innumerables ocasiones anteriores que no reportaron el origen de su financiamiento.
“La orden de los Frailes Menores Franciscanos de la Provincia Seráfica de Asís y 16 asociaciones y fundaciones incumplieron leyes sobre el reporte de sus estados financieros, juntas directivas, detalle de sus donaciones e identidad y origen de sus donantes”, según la resolución del Ministerio de Gobernación.
La decisión, publicada en el diario oficial La Gaceta, establece que los bienes muebles e inmuebles de los organismos cancelados pasarán a manos del Estado.
El presidente Daniel Ortega, en el poder desde 2007, ha cerrado más de 3.000 oenegés y encarcelado miles de opositores, enviando muchos de ellos al exilio, desde que endureció las leyes tras las protestas sociales que estallaron durante tres meses en 2018 y que derivaron en una violente represión que dejaron más de 300 muertos, según Naciones Unidas.
La relación entre la Iglesia católica y el gobierno se deterioró en medio de esas protestas, que Ortega consideró un intento de golpe de Estado promovido por Estados Unidos, que junto a la Unión Europea (UE) y otros países denunciaron la violenta represión contra los opositores, muchos de ellos ex integrantes del Frente Sandinista de Liberación Nacional que tras una larga lucha logró derrocar a la dictadura de Anastasio Somoza.
Varios religiosos han sido conminados a abandonar el país y 12 sacerdotes fueron enviados a Roma la semana pasada tras su excarcelación, cuando todavía queda en prisión el obispo Rolando Álvarez, fuerte crítico del gobierno, condenado en febrero a más de 26 años bajo cargos de propagación de noticias falsas y desacato.
(Con información de AFP)
