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El regreso del “Colo” Ramírez en un puesto en el que fue goleador y el sueño cumplido de jugar con hinchas en el Parque
El ingreso de Santiago “Colo” Ramírez en Nacional, en el segundo tiempo del partido ante Progreso, cuando los tricolores buscaban dar vuelta el 1-0 adverso en el Gran Parque Central, fue una de las sorpresas de Martín Ligüera en su segundo partido en su segundo ciclo en los albos.
Abajo en el marcador desde el minuto 56’, un minuto después el técnico mandó a la cancha en primera instancia a Andrés D’Alessandro y Leandro Fernández por Matías Zunino y Alfonso Trezza.
Luego, a los 70, ingresó Ramírez por Brian Ocampo y Ángelo Gabrielli por Armando Méndez
La entrada del “Colo” llamó la atención porque llevaba mucho tiempo sin aparecer en el equipo.
Sus últimos minutos habían sido el 28 de marzo de este año cuando jugó los 14 finales ante Deportivo Maldonado por la última fecha del Clausura pasado, también con Ligüera como entrenador. Con Alejandro Cappuccio estuvo convocado en nueve ocasiones, pero nunca ingresó.
Por lo que el juvenil volvió a jugar de la mano del actual técnico, quien este domingo también tuvo en el banco de suplentes a Thiago Vecino y a Maxi Cantera, como opciones ofensivas, mientras que Guillermo May no estuvo en el plantel, como tampoco Juan Manuel Gutiérrez.
Una posición que conoce bien
Pero lo que más llamó la atención fue la posición en la que lo colocó Ligüera, de extremo o puntero izquierdo, cuando lo habitual era verlo más adentro del área.
De todas formas, no fue una decisión improvisada del entrenador quien, como ya demostró cuando puso a Cantera de 9 en Tacuarembó, no es partidario de andar inventando sobre la marcha y sus decisiones están sustentadas en actuaciones previas y conocimiento. En ese caso, al volante lo puso en esa posición ante Cerro Largo FC, por la baja de Gonzalo Bergessio, porque lo había visto en ese puesto cuando jugaron juntos en Fénix.
Con el Colo Ramírez, a quien dirigió en Tercera, pasó algo similar, porque el delantero ya conoce muy bien esa posición en la que ingresó y en la que tuvo algunos buenos desbordes y avances.
Así lo contó a Referí el entrenador Tabaré Alonso, de la Cuarta y también por estas semanas de la Tercera tricolor, quien en 2019 dirigió al juvenil en Cuarta y lo colocó en el mismo puesto que lo utilizó Ligüera este domingo.
“En 2019, en su primer año de Cuarta, yo lo puse de extremo por izquierda. Él venía de jugar de 9, de centrodelantero, en Quinta”, contó Alonso, quien dio detalles del estilo de juego del Colo, quien llegó a las formativas de Nacional en 2015.
“No es un jugador rápido, no es lento tampoco, pero no es un jugador que se destaque por su velocidad. Pero es un jugador que técnicamente es muy bueno, entonces, al tener buenos controles de balón, le resulta todo más fácil”, señaló.
Alonso también destacó algo que se pudo ver de Ramírez ante Progreso: los mano a mano para superar rivales. “Es muy bueno en el duelo, en el uno contra uno, y tiene buen centro, buena definición, llega mucho, es muy inteligente y entiende mucho el juego”.
En aquel año en Cuarta, jugar por la banda no le impidió marcar goles. Al contrario, en esa temporada pasó los 20 tantos y fue el máximo artillero de la categoría. “Ese año hizo unos 23 o 24 goles. Salimos campeones de la Anual y el Colo fue el goleador del torneo”, recordó Alonso, quien dio más detalles del juvenil.
Sobre su posición, señaló que puede jugar en todos los puestos del ataque, por punta izquierda, como en el área y también con perfil cambiado, una posición que también le gusta.
“Yo lo coloqué como puntero izquierdo y lo hizo muy bien”, dijo Alonso. “Técnicamente es bueno y tácticamente entiende todo también, es muy inteligente, tiene buenos apoyos. Le pega bien a la pelota. Tiene buen cabezazo, aunque no es un jugador alto y no es su fuerte, tiene goles de cabeza. Y manejaba muy bien la pelota quieta. Tiene muy buenas características”, concluyó el entrenador que fue uno de los formadores del Colo y que recientemente lo dirigió en el último clásico de Tercera en el Capurro, en el que hizo el gol albo y compartió ataque con Franco Fagúndez, otro delantero juvenil que fue ascendido por Ligüera.
Su primer partido con público en el Parque
El de este domingo ante Progreso fue el sexto partido en la principal categoría de Ramírez, de 19 años, quien debutó oficialmente en Nacional el 14 de enero de este año, en la final del Torneo Intermedio que los tricolores le ganaron a Wanderers por penales.
Jorge Giordano lo hizo debutar al colocarlo a falta de 19 minutos para el final del alargue, en lugar de Emiliano Villar, y tuvo su estreno y primer título en Primera.
Luego, volvió a entrar en el 1-1 ante Rentistas del 17 de enero por el pasado Clausura (12 minutos), estuvo convocado en cinco partidos sin ingresar, y reapareció el 13 de marzo en la derrota 2-1 ante Danubio en el Gran Parque Central (18 minutos), caída que le costó la destitución a Giordano.
Con Ligüera como DT interino, Ramírez volvió a tener minutos, 30, al siguiente partido, en el encuentro en el que perdieron 2-1 ante Boston River, y tuvo su tercera participación consecutiva en la victoria 2-1 ante Deportivo Maldonado con la que se aseguraron la Tabla Anual.
Ese había sido su último partido hasta este domingo. En las finales del Uruguayo ante Rentistas estuvo de suplente y fue campeón. Y luego, con Cappuccio, fue dos veces al banco por Copa Libertadores y en cuatro juegos del Apertura, sin tener minutos.
Frente a Progreso fue un partido especial, por volver a jugar y por ser su primer encuentro en el Gran Parque Central con los hinchas bolsos en las tribunas.
“Mi primera vez con ustedes, lo soñé de todas las maneras posibles y ayer lo viví”, escribió en sus redes.
“Ahora toca mejorar para lo que resta del año y pelear por el objetivo. Vamo Nacional”, agregó el Colo, que quiere continuar el legado goleador que dejó su hermano en Liverpool, Juan Ignacio, hoy en Saint Etienne de Francia, aportándole buen juego y tantos al equipo de Ligüera.
