Con el brete 139, La Elisa se quedó con el premio a la Gran Campeona Polled Hereford, uno de los objetivos más codiciados cada año en la Expo Prado. La jura la realizó Joaquín Zabaleta Stirling y el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, colocó la cocarda principal.
El animal, de 780 kilos, llegó desde la cabaña sanducera. Fue el segundo año en el que participó de la muestra en la Rural del Prado. En 2019 ganó el primer premio en la categoría Ternera. Durante la calificación, el jurado alagó el largo y firmeza de su lomo.
La mejor mocha es una vaca de dos años que dentro de un mes parirá al primer ternero que concibió de forma natural. Según explicó a El Observador Walter Carlos Romay Elorza, su expositor, ya ha parido tres terneros que concibió a través de tratamientos in vitro. Cuando termine la Expo Prado volverá a la cabaña. Su expositor no descarta poner alguno de sus embriones en venta.
“Tiene información objetiva realmente muy destacada, con facilidad de parto y crecimiento. Todos sus datos son deseables y tiene una construcción carnicera de su res realmente admirable”, dijo Romay y agregó: “Es bastante cercana a lo que se busca para el ganado acá en Uruguay”.
El jurado pidió un aplauso para todas las finalistas. “Quedó una muy linda fila, desde la ternera hasta la vaca son muy lindas, se nos está haciendo difícil la definición”, dijo previo al fallo final.
Agradeció a sus padres que estaban en el público y de quienes heredó su gusto por trabajar con la raza. Elogió los colores que se vieron en el ruedo y la combinación del verde con el marrón de las Hereford, “sin duda es el color más lindo que tiene la ganadería”.
Entre aplausos, Lacalle Pou entregó los premios al cabañero ganador junto al presidente de la Asociación Rural del Uruguay (ARU), Gabriel Capurro; al presidente de la Sociedad de Criadores de Hereford, Felipe Bove; y al presidente del Instituto Nacional de Carnes, Fernando Mattos.
Zabaleta aprovechó y dijo: “Quiero felicitar a Luis por su gestión y agradecerle lo que está haciendo por el país. Nosotros desde el campo vamos a seguir apoyando, como siempre”.
Romay Elorza declaró que para él “que la haya coronado el presidente es realmente una alegría, hace mucho tiempo que no tenemos la presencia y el apoyo en el sector agropecuario en general del presidente y del gobierno”.
“Independientemente del aprecio y el respeto personal que le tengo, es un gran mensaje para todos los que estamos acá, que recibamos directamente su presencia y su apoyo en un momento tan difícil es una enorme alegría” agregó.
Reservada Gran Campeona fue el brete 144, de cabaña San Salvador. Esa vaca joven de 820 kilos llegó a la pista junto a su ternero y fue galardonada por el ministro de Defensa, Javier García.
La vaca del brete 41 fue doblemente galardonada. Fue elegida Gran Campeona Hereford y Campeona Suprema. Esta vaca de dos años fue expuesta por El Baqueano (Durazno), pesa 712 kilos y según el jurado “su definición fina fue lo que la hizo primar”.
Tras la premiación, Santiago Bordaberry, integrante de la cabaña, explicó a El Observador que es pura sangre de El Baqueano. Su padre fue un toro de la cabaña y su madre fue hija de un toro del mismo lugar, “es un pedigrí muy puro de El Baqueano, muy hecho para el pasto y la pastura, con buenos números y a punto de parir su primer ternero”. Y agregó que es un animal “muy fértil”.
Declaró no poder estar más contento, porque es el segundo año consecutivo que la cabaña recibe premios. En 2019, la hermana de esta Gran Campeona también fue galardonada.
La embajadora de Gran Bretaña, Faye 0’Connor, junto al director de Exposiciones de la ARU, Rafael Ferber, y al presidente del INAC y al presidente de la Sociedad de Criadores de Hereford, entregaron este premio.
Antes de la coronación, el jurado dijo que los animales clasificados formaron “una fila espectacular de hembras” y que “el Hereford está manteniendo un tipo muy equilibrado, carnudo, largo y funcional”.
Explicó que en la jura buscó aspectos de feminidad en los animales. “Queremos felicitar a los cabañeros porque esta es una fila en la que cualquiera puede ser Gran Campeona”, concluyó.
La Gran Campeona se quedará en la cabaña y, explicó Bordaberry, va a parir en octubre y van a ver “cómo produce en el campo. Anduvo bien acá pero vamos a ver cómo produce en el campo natural que es donde seleccionamos más a nuestros animales”.
El cabañero dijo estar muy contento de ganar el premio y de recibirlo junto a su familia, “como muchas empresas del sector agropecuario somos una empresa familiar y así lo vivimos, sobre todo cuando se trata de genética, uno sabe que hay mucho para atrás y mucho por delante. Este trabajo lleva muchos años, y el hecho de que los menores estén apreciando ahora estos festejos nos ayuda a seguir mirando hacia adelante en el tiempo, en materia de selección genética es muy importante mirar hacia adelante”, concluyó.
La Reservada Gran Campeona fue el brete 43, una vaca de 744 kilos expuesta por Ninon Rosa Ramírez Mendiburu.
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