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Estaba detenido, se enteró que iba a ir preso por matar a un policía, y se tiró por la ventana
Un hombre se tiró por la ventana del primer piso del edificio que alberga los juzgados penales, en la calle Juan Carlos Gómez, al enterarse que iba a ser imputado por asesinar al policía Roberto Santana en abril de este año.
El delincuente estaba siguiendo con atención el desarrollo de una audiencia donde otras tres personas –imputados todos por ese asesinato en calidad de coautores– lo acusaban de haber sido el que disparó el arma. Lo que el indagado observaba de manera remota –estaba en una sala aparte para evitar riesgo sanitario– era la declaración anticipada de testigos del delito, un recurso previsto en el nuevo Código del Proceso Penal en la que las personas aportan detalles del hecho investigado antes de la imputación, y eso es tomado como prueba.
En determinado momento, según informó Telenoche y confirmó El Observador con el fiscal Juan Gómez que realizaba el interrogatorio, el hombre abrió la ventana y se arrojó a la calle. Cayó sobre el auto de una actuaria del Poder Judicial, y comenzó a correr. Eran cerca de las 19 de este miércoles, y hacía cerca de ocho horas que estaba presenciando la audiencia.
Uno de los policías que comenzó a seguirlo fue el que se encarga de la seguridad de Gómez, pero no lo alcanzó. Fue detenido finalmente a los pocos minutos y a pocas cuadras, escondido en la entrada de un garaje de la zona.
Ahora, el acusado de disparar contra Santana será imputado este jueves por un homicidio muy especialmente agravado, delito por el que podrá recibir un mínimo de 15 años de cárcel.
El cabo Santana fue asesinado a sus 41 años el 4 de abril pasado, luego de recibir dos disparos al enfrentarse a tiros con cuatro rapiñeros que intentaron robarle su auto.
Santana estaba acompañado por su pareja, también policía, cuando en el cruce de las calles Vizcaya y Suiza, en el Cerro, fue interceptado por los asaltantes, quienes intentaron llevarse el auto. Los dos policías se resistieron y comenzaron un intercambio de disparos con los delincuentes, en el que Santana recibió dos heridas, en el cuello y la espalda.
Herido de muerte, fue llevado al Hospital Policial, donde falleció luego de ser operado. Su pareja, en cambio, no recibió heridas.
Días después, según recordó Gómez, el presunto autor material había sido detenido, pero entonces "no se reunieron los elementos" necesarios como para llevarlo ante la Justicia, por lo que había quedado emplazado, "con la obligación de no ausentarse de su domicilio" y con otras medidas limitativas del estilo.
