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Los motivos por los que Uruguay exigirá el test de hepatitis C en el carné de salud
El Poder Ejecutivo decretó la incorporación del test de Hepatitis C dentro del control de salud; el carné que se exige para la práctica de deportes y la habilitación de cualquier trabajador, y que debe renovarse cada dos años.
Hasta ahora el diagnóstico del virus que causa la Hepatitis C no figuraba siquiera como sugerencia opcional, como sí lo está el test rápido del VIH. Pero, en sintonía con la agenda internacional, Uruguay se trazó el objetivo de la eliminación del virus de la Hepatitis C para 2030 y por ello se hizo necesario conocer quiénes han tenido la infección.
“Uno de cada cien uruguayos podría estar infectado por el virus de la Hepatitis C”, explicó a El Observador el catedrático de Enfermedades Infecciosas, Julio Medina. “De eso que son positivos en el test, dos tercios van a tener replicación del virus en la sangre y son pasibles de ser tratados con antivirales”.
La hepatitis C es una inflamación del hígado a causa de un virus. Ese patógeno es contagiado a través de la sangre: transfusiones sanguíneas en mal estado, inyectables contaminados, o pinchazos para consumo de drogas. Una vez en el cuerpo, casi un tercio de las personas hacen frente al organismo invasor y lo eliminan, sin necesidad de tratamiento, en menos de seis meses. Pero al resto le queda en el organismo y se convierte en crónico.
Es así que en el mundo se estima que, cada año, se infectan un millón y medio de personas. Una cuarta parte del millón fallece porque esa inflamación deviene en cirrosis o un cáncer de hígado.
Pese a que no existe una vacuna eficaz contra la Hepatitis C, la enfermedad puede ser tratada con antivirales y, sobre todo, su diagnóstico en económico y sencillo. Por eso se incorpora al control de salud poblacional.
El Ministerio de Salud Pública se puso el objetivo de diagnosticar, antes de 2030, a nueve de cada uruguayos con hepatitis C y tratar a al menos ocho de cada diez pacientes. De esa manera se reduciría la mortalidad en un 65%.
El carné de salud dejó de llamarse carné y es, desde hace una década, un control. Detrás del cambio estaba la idea de dejar atrás un trámite administrativo, para dar lugar al control continuo de la salud de la población local. Por eso desde hace una década el servicio es gratuito.
