Fallo sobre La Manada en España sienta un precedente para caso similar de Uruguay

La sentencia se hizo pública unos días después, el 5 de julio, y no dejaba lugar a dudas. Los cinco acusados cometieron una violación múltiple “con pleno conocimiento” y de “enorme crudeza”, mientras que la víctima estaba “totalmente desprotegida”.

La joven, que cuando ocurrieron los hechos tenía 18 años, fue violada por sus agresores en el portal de un edificio, donde además grabaron videos de la escena. Ella “quedó doblegada por el miedo y no pudo ofrecer resistencia alguna”, añade la sentencia.

“El silencio de la víctima solo se puede interpretar como una negativa, ya que no es admisible forzar el derecho hasta extremos de exigir de las víctimas actitudes heroicas que inexorablemente las conducirán a sufrir males mayores", señaló el alto tribunal.

Con esa decisión de la justicia, considerada como una victoria dentro del movimiento feminista después de tres años de lucha, se revocó la sentencia anterior de dos tribunales de Navarra que condenó a los cinco hombres por abuso sexual y no por violación.

El hecho de que en esa primera instancia los condenaran solo por abuso sexual y que los dejaran en libertad condicional provocó toda clase de críticas en buena parte de la sociedad española, que salió a manifestarse en las calles de varias ciudades.

Este ha sido sin duda uno de los casos más sonados en el país, pero no la única violación grupal. De hecho, desde 2016 y hasta principios de este mes de julio, según datos del proyecto Geoviolencia sexual que recopila la plataforma Feminicidio.net, se registraron más de 120 agresiones sexuales múltiples en España.

Ya comenzó un nuevo juicio por el caso conocido como “la Manada de Manresa”, en el que presuntamente seis jóvenes violaron en 2016 a una chica de 14 años durante una fiesta en un galpón abandonado.

¿Existen en Uruguay casos similares?

Si bien en Uruguay ha habido algunas denuncias, como la del camping de Santa Teresa en enero de 2014, en que una joven denunció haber sido violada por varios hombres, esa denuncia no se pudo probar y la Justicia archivó la causa. 

El caso más reciente y que sí tuvo consecuencias judiciales fue el de una mujer que el pasado 1° de enero denunció una supuesta violación cometida por tres hombres dentro de una carpa en un camping de Valizas. La víctima conocía a uno de ellos y aseguró en su denuncia que al tratar de salir del lugar, los tres impidieron su paso y la violaron.

Si bien los informes médicos y psicológicos que se le realizaron a la joven agredida confirmaron su relato, los hombres aseguraron que las relaciones sexuales fueron consensuadas. La fiscalía de Rocha pidió a la Justicia imputarles a los tres hombres "un delito de abuso sexual especialmente agravado por invasión del cuerpo a través de la penetración y la pluriparticipación".

“El tema central acá es el consentimiento porque es lo que alegan los agresores. Ahí está el quid de la cuestión (como en el caso de La Manada). Nuestra ley integral de violencia establece que la falta de resistencia en la historia sexual de la víctima no puede considerarse para determinar el consentimiento”, dijo a El Observador la abogada especializada en violencia de género Alicia Deus.

En ese sentido, la ley “tiene una orientación clara: no es no y eso tiene que ser válido en todas las circunstancias”, añadió.

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Deus consideró que este caso podría ser el termómetro de si realmente hay un cambio de orientación respecto a la violencia basada en género o no.

Ahora corresponde al fiscal de Rocha Jorge Vaz presentar la acusación formal para llevar a juicio oral a los imputados.

Consultado por El Observador, Vaz admitió que si bien tienen una “importante sobrecarga de trabajo”, la acusación ya está casi pronta y esperan poder llevarlo a juicio oral antes de que termine este año.

“No se trata del mismo caso que el de La Manada, aunque hay similitudes, pero la Fiscalía va a tratar de hacer todo lo posible para obtener una condena. Este va a ser un juicio oral orientado desde una perspectiva de género”, aseguró.