Google retiró el videojuego "Simulador de esclavitud" ante protestas de las autoridades brasileñas

En realidad, la noticia, demencial, por cierto, debería haber sido cómo los técnicos de Google y sus autoridades pudieron llegar a pensar que la esclavitud, una de las peores prácticas ejercidas por la humanidad, podría transformarse en un juego. Pero sí, se permitieron hacerlo.

Ante esa locura, producto de la banalización del mal, la fiscalía brasileña abrió una investigación por “discurso de odio” en esta aplicación en portugués que, a mitad de la semana, como otra prueba más de lo inconcebible, contaba con más de mil descargas en la plataforma Playstore, de Google.

El “juego” aconsejaba a los participantes a “utilizar los esclavos para enriquecerse y a hacer todo lo posible para evitar la abolición de la esclavitud, para acumular dinero”.

En una muestra de lo absurdo a lo que puede llegar el mercado, entre las reglas de uso de la aplicación se indicaba que el juego había sido “concebido únicamente con fines de entretenimiento” y que sus creadores (de alguna manera hay que llamarlos), empleados de una empresa llamada Magnus Games, según detalla la fiscalía de Sao Paulo, condenaban “cualquier tipo de esclavitud”.

Tras el retiro de la macabra aplicación, producido este miércoles, Google aseguró en un comunicado que no permite “aplicaciones que promuevan violencia o inciten al odio contra individuos o grupos debido a su raza u origen étnico”. Y aunque nada dijeron de los motivos por los cuales lo habían subido a su tienda, dijeron que los internautas son quienes pueden denunciar este tipo de contenidos.

Un comunicado del ministerio brasileño de Igualdad Racial afirmó que las autoridades se contactaron con la empresa Google para que implemente medidas tendientes a producir “un filtro eficiente de contenidos que contengan discurso de odio, intolerancia y racismo, y evitar que se diseminen con tanta facilidad y sin moderación en la sociedad”.

Brasil fue, en 1888, el último país de América en abolir la esclavitud, pero el racismo continúa su demencial presencia en una sociedad donde más de 56% de la población se identifica como afrodescendiente. 

La diputada de Río de Janeiro Renata Souza, por el Partido Socialismo y Libertad (PSOL), denunció este viernes que “Brasil es uno de los principales consumidores de las plataformas de Google, y tener una aplicación que rememora el tiempo de la esclavitud, que premia a quien tortura más y quien vende personas esclavizadas, es una mezcla de racismo con fascismo”.

La condena de las autoridades brasileñas contra Google se suma a la realizada a principios de este mes de mayo, cuando criticó abiertamente los enlaces que aparecían debajo del motor de búsqueda de la empresa y emitió un proyecto de ley que busca regular las redes sociales y los contenidos en línea en Brasil, aunque un juez de la corte suprema ordenó la apertura de una investigación por “campaña abusiva” contra el proyecto, que será votado próximamente en el Congreso.