El hidroforraje es un proceso en el que se trabaja la germinación de la semilla forrajera manejando condiciones climáticas como la humedad, la temperatura o la luminosidad para “bajar el costo de la ración, sobre todo para pequeños productores”, explicó a El Observador el docente e instructor agrario del Polo Tecnológico de Rivera, Mario Peschera.
Este profesor acompaña en la Expo Prado a varios alumnos de ese centro educativo que muestran el hidroforraje en el stand de la Dirección General de Educación Técnico – Profesional (UTU), en el que se pueden conocer propuestas de las 34 escuelas agrarias que hay en todo el país. Esta técnica, que es una novedad, según indicó, es trabajada por alumnos de tercero de bachillerato agrario en Rivera y es implementada por algunos productores por sus diferentes beneficios. Por ejemplo, 1 kilo de semillas de avena produce, en 15 días, 8 ki.os de hidroforraje como mínimo, listo para consumo inmediato, indicaron desde UTU.
En Rivera hay 320 alumnos agrarios en todos los ciclos, que tienen ciclo básico, bachillerato y la posibilidad de realizar tecnicaturas forestales. El bachillerato dictado en el Polo Tecnológico de Rivera es binacional, algunos alumnos son uruguayos y otros llegan desde Brasil.
En el stand de UTU también se puede conocer a Sol, una oveja Hampshire Down, y su cría, una cordera pedigrí nacida hace pocas semanas. Sol pertenece a la cabaña de la Escuela Agraria de Montes, ubicada en Canelones, que en la jura de Hampshire Down ganó el premio al Reservado Gran Campeón pedigrí, con un ovino, también hijo de Sol.
Gonzalo Biscazo, docente y encargado de la cabaña, comentó a El Observador que en la Escuela Agraria de Montes son 120 los alumnos que estudian. Allí todos trabajan con ovinos, pero quienes participan más en la preparación de los animales para exposición son los alumnos de bachillerato.
La cabaña se desarrolla en un predio de 17 hectáreas donde desde UTU se quiere “seguir mejorando la genética Hampshire Down no solo para participar en exposiciones sino para promover la producción ovina que es un rubro muy rentable en predios medianos y pequeños”, comentó el docente.
“Todo esto es gracias a los chiquilines porque son los que hacen todo el trabajo, nosotros tratamos de guiarlos por donde nos parece que es lo mejor para llegar a una exposición”, agregó.
El programa agropecuario de UTU tiene 5.000 alumnos en todo el país, 32 de las 34 escuelas agrarias tienen internado y la institución cuenta con 8.000 hectáreas de campo divididas en diferentes departamentos donde se desarrolla la educación en ganadería, agricultura, forestación, lechería y vitivinicultura.
Este martes se realizó el lanzamiento del stand de UTU en la exposición, en el que participó el presidente del Codicen, Robert Silva; el director de UTU Juan Pereyra; la subdirectora Laura Otamendi y varias autoridades de gobierno como el ministro de Ambiente, Adrián Peña. En ese marco, el director del Programa de Educación para el Agro, Juan Fitipaldo, dijo a El Observador: “UTU apuesta a la excelencia educativa, venimos a mostrar otra UTU, un cambio, una apertura, y a entablar contacto con la gente agraria para generar vínculos”.
En esa actividad las personas que se acercaron pudieron ver también trabajos de huerta, vinos y propuestas gastronómicas desarrolladas por alumnos de UTU.
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