El número de personas sin trabajo volvió a crecer en enero en Francia luego de un aumento menor en diciembre, colocando más presión sobre el presidente socialista Francois Hollande, quien ha hecho del combate al desempleo su máxima prioridad.
El total de 3,17 millones de franceses desempleados de enero fue el máximo desde julio de 1997 y se acercó al récord histórico de 3,196 millones, según los datos que publicó el martes el Ministerio de Trabajo.
Analistas encuestados por Reuters prevén que la tasa de desempleo, ya por encima del 10 %, seguirá subiendo hasta comienzos del año próximo.
Los datos de la cartera laboral son el indicador de empleo más frecuentemente informado en Francia, aunque no están preparados según los estándares de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), ni expresados como un porcentaje de personas que buscan empleo en la fuerza laboral.
En el cambio de metodología, el Ministerio de Trabajo el 1 de enero modificó el cronograma respecto de cuándo se remueve a las personas de las listas de quienes están buscando empleo.
Eso implica que 21.100 personas que permanecieron en ellas en enero ahora serán removidas en febrero, lo que infla artificialmente los datos del mes pasado.