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Hubo récord de casos diarios pero en el MSP no pierden el hilo epidemiológico
Luego de un leve descenso en los casos activos en Uruguay, este miércoles el país registró un nuevo récord de casos diarios de covid-19: 65 infectados, según reportó el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae). Sin embargo, aunque la cifra preocupa a las autoridades, en el Ministerio de Salud Pública (MSP) no se alarman porque son conscientes de que el nexo epidemiológico no se ha perdido. La gran mayoría de los nuevos casos son contactos de casos conocidos y ya registrados por el gobierno en estos últimos días.
Desde el MSP entienden también que el aumento de casos se debe, en parte, a la "búsqueda activa" que están realizando desde la cartera y a la gran capacidad de rastreo con la que cuentan. Las autoridades aseguran que por cada caso nuevo que detectan, logran aislar rápidamente a unos 25 contactos por infectado.
Según dijeron a El Observador fuentes de la cartera, luego de la hora de cierre del reporte de casos de este miércoles, las autoridades fueron notificadas de más casos –además de los 65– que se sumarán en el reporte de este jueves. Al menos siete de estos nuevos infectados no reportados este miércoles, corresponden a un contingente de militares que llegaron del Congo.
Pero más allá de estos nuevos casos, en Montevideo hay varios brotes en diferentes áreas: en el Club Atlético Bella Vista, en el Instituto Crandon, en Cancillería, en el Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU), así como focos producto de "eventos sociales" y contagios intrafamiliares.
Luego de que el pasado sábado Bella Vista comunicara un primer caso, este miércoles los papales confirmaron que hay otros 14 futbolistas afectados y dos funcionarios, un utilero y un cocinero, según informaron a Referí desde el Ministerio de Salud Pública (MSP) y desde la Secretaría Nacional de Deporte (SND). A raíz del brote, se continúan realizando hisopados a futbolistas y entrenadores de las categorías juveniles, como a funcionarios del club.
En el Crandon, en tanto, hasta la tarde de este miércoles reportaban un total de siete infectados: cuatro en Secundaria y tres en Primaria, según informó a El Observador el director general del colegio, Carlos Varela.
De los cuatro de Secundaria, hay dos que son hijos de uno de los embajadores que dio positivo por el brote en Cancillería. Luego hay otros dos casos, aparte, que son compañeros de la misma clase, pero por el momento se desconoce el origen de su contagio. En total, llevaron a cuarentena a unas 80 personas, entre alumnos y docentes. Algunos ya fueron hisopados y otros lo serán en las próximas horas.
Por otro lado, en Primaria hay tres casos positivos: dos maestras y un psicólogo, que no están vinculados con los casos de Secundaria. El caso índice es el de una maestra que se contagió con un caso positivo del brote del INAU. La otra maestra (encargada de dar clases de inglés) y el psicólogo compartieron mucho tiempo con ella en el aula.
En Primaria hay tres grupos en cuarentena. Dos de ellos porque tuvieron contacto con estas maestras y un tercero porque una de las alumnas es hermana de uno de los casos positivos de Secundaria. De todas formas, a diferencia de lo que ocurre en el liceo, el resto de los grados escolares continúan las clases presenciales con normalidad. Así lo determinó el Ministerio de Salud Pública, según contó Varela, por la evidencia de que los niños se contagian poco y tampoco son grandes transmisores del virus, a diferencia de los adolescentes.
El INAU, por su parte, llegó a los 34 casos el martes pero las autoridades entienden que el brote está controlado. El foco se inició en el departamento de Espectáculos Públicos. Una funcionaria, que contrajo la enfermedad fuera de la institución y no lo sabía, repartió el virus en su equipo de trabajo. La mujer, que desde hace días está grave en CTI, contagió al director del departamento. Y este director, a su vez, a la directora general del INAU, Dinorah Gallo.
Esta secuencia de contagios hizo que el virus llegara a la cúpula del instituto e infectara al propio presidente, Pablo Abdala, así como a tres subdirectoras nacionales. Los integrantes del sindicato, por su parte, debieron ser hisopados por haber estado en contacto con Gallo en una reunión, pero todos dieron negativo.
En el interior, la mayor preocupación está en Rivera. Este miércoles se reportaron 15 casos nuevos en esa ciudad fronteriza con Brasil. El martes habían sido 12. De todas formas, el equipo epidemiológico del gobierno entiende que para el fin de semana se va a comenzar a ver el impacto de las medidas tomadas la semana pasada y creen que, a partir de ahí, los casos van a empezar a descender.
Pero además de Rivera hay casi una decena de infectados en varios departamentos: tanto Artigas como Tacuarembó cuentan con ocho casos activos mientras que San José tiene seis.
En ese sentido, la Federación Médica del Interior (FEMI) emitió una carta pública a la población este miércoles, pidiendo "encarecidamente" que "se refuercen las medidas de distanciamiento físico y uso de tapabocas". Los agremiados aseguran necesitar la ayuda de los uruguayos "incluso más que en abril o mayo".
"Estamos expuestos, los equipos de salud y la población, más que antes. Estuvimos y estamos en la primera fila de la batalla, pero la diferencia es que antes contábamos con una retaguardia que nos daba la garantía y la confianza para hacer nuestro trabajo sin mirar atrás: la actitud y la responsabilidad de los uruguayos. Hoy, sinceramente, sentimos que no contamos con esa retaguardia. No nos dejen solos", remata el comunicado.
