Indagarán al procesado en causa del comando Barneix por los cinco asesinatos a trans

A la vuelta de su licencia, la jueza Tórtora volvió a examinar las tres piezas del expediente y resolvió pedirle a la fiscal Sylvia Lovesio –que imputó al involucrado en la causa por distribución y producción de pornografía infantil– el material incautado, insumos que recibió este martes, confirmó la magistrada a El Observador. Lovesio había hecho referencia a que en un solo disco duro había 1.200.000 fotos de menores. 

La semana pasada Tórtora se reunió con los peritos intervinientes en la causa y allí examinaron las pruebas. Luego, se reunió con Asuntos Internos del Ministerio del Interior y con el fiscal Luis Pacheco que será quien trabajará en el caso, y es quien pidió el procesamiento del joven estudiante de Medicina por las amenazas del comando Barneix de 2017. Según dijo la jueza, coordinaron acciones y resolvió enviarle el material a Pacheco para que solicite las pruebas que entienda pertinentes. 

La causa por la ola de asesinatos a personas trans vio pasar muchos fiscales y jueces pero nunca se logró inculpar a nadie. La jueza actual confirmó a El Observador que fueron cinco los homicidios que quedaron sin aclarar. El perito psicólogo Robert Parrado había dicho días atrás que la investigación constó de numerosos informes, citaciones a testigos y audiencias.

El comando Barneix

El estudiante de Medicina avanzado que tiene cerca de 30 años, fue imputado por almacenamiento y distribución de pornografía infantil, instigación pública a delinquir, apología del delito, e incitación al odio. Según surgió de esa indagatoria llevada adelante por la fiscal Lovesio, expresó en grupos de WhatsApp su intención de concurrir a otros países para casarse con niñas y poder raptarlas. Además, hablaba de que hacía “seguimiento y control” del presidente Luis Lacalle Pou. 

Al día siguiente de esa imputación, fue procesado por violencia privada en la causa por las amenazas a los 13 personas entre las que estaban el exministro de Defensa Jorge Menéndez, el fiscal de Corte Jorge Díaz, el exjuez Federico Álvarez Petraglia, la exfiscal Mirtha Guianze y abogados promotores de causas de derechos humanos como Óscar López Goldaracena y Pablo Chargoñia. 

Pacheco lo encontró presuntamente responsable de los mails anónimos remitidos en enero de 2017. El texto decía que por “cada suicidio” de militares perseguidos judicialmente, se asesinaría a tres de esa lista, elegidos al azar. La intención era tomar “venganza” por el suicido del militar Pedro Barneix, procesado con prisión por la jueza Beatriz Larrieu en 2015 por su responsabilidad en el asesinato de Aldo Perrini en 1974 durante la dictadura uruguaya (1973-1985). Barneix se quitó la vida antes de ser detenido. La Fiscalía entendió que la intención del hombre era obligar a los amenazados a “tolerar, hacer o dejar de hacer determinadas conductas en el ámbito de sus competencias”, excediendo así la mera amenaza. 

Estos mails amenazantes fueron enviados a través de un dominio de la deep web (“tor” de the onion route”, según se constató en las pericias).

Según surgió de la indagatoria, el hombre había creado en sus blogs una micronación denominada imperio céltico en la que “reivindicaba a militares procesados" y condecoró a los generales (Miguel) Dalmao y (Pedro) Barneix, otorgándoles el título de duques. El acusado eligió no declarar ante la Justicia por este caso.

Pacheco entendió que los mensajes llamando a votar a Luis Lacalle Pou en 2019 acompañado del general Guido Manini Ríos, también fueron obra del procesado. Los mensajes fueron enviados con un número con característica de Brasil y el indagado había ido a votar a la ciudad de Río Branco, fronteriza con Brasil, en esa fecha. Allí tiene establecida su credencial.