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Industria avaló baja de las naftas, pero la última palabra es de Economía
La propuesta de ANCAP de abaratar las tarifas entre 2% y 3% queda en manos de Astori
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16 de octubre de 2015 a las 05:10
El Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) está de acuerdo con la propuesta aprobada hace una semana por el directorio de ANCAP, que propone reducir las tarifas de los combustibles entre 2% y 3% en promedio, informaron a El Observador de fuentes de esa cartera. El informe técnico aprobado por el ente recién fue entregado a Industria el miércoles y fue enviado al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
El ritmo con que transcurre el trámite en esta oportunidad es notoriamente más lento que en otras instancias, cuando lo que estuvo en discusión fue un aumento de precios. De hecho, en ocasiones anteriores, el decreto con las nuevas tarifas ha sido publicado inmediatamente después de conocerse los informes técnicos. Incluso la decisión de mantener los precios o ajustarlos a la baja se podría haber tomado mucho antes, si se considera que la información que se toma como base es la evolución del petróleo Brent y del dólar en el período julio – setiembre. Esa información está disponible hace 15 días.
"A nosotros formalmente no nos llegó nada. No hay ninguna propuesta de ajuste. Cuando venga, la estudiaremos y tomaremos una decisión, pero acá no llegó nada", respondió ayer el subsecretario de Economía, Pablo Ferreri ante la consulta realizada por El Observador.
Según cálculos de El Observador, tomando como referencia los costos del Brent en el mercado internacional y la evolución promedio del dólar, el precio del barril en pesos durante el pasado trimestre quedó 9,7% por debajo de la paramétrica de ANCAP. Para fijar las tarifas, el ente considera un valor del crudo de US$ 60 y un dólar a $ 27,5.
Desde fin de setiembre, las autoridades del MEF han mostrado cierta cautela respecto a una posible corrección a la baja de las tarifas. Primero fue el ministro de Economía, Danilo Astori que al ser consultado por el tema respondió que no estaba prevista en el corto plazo, aunque no descartó su concreción. Luego, el lunes 28, en el programa Entrelíneas de Canal 20 de TCC, el subsecretario Pablo Ferreri dijo que "si bien es cierto que el petróleo bajó, el dólar subió y por eso hay que ser cautelosos".
Aunque una baja de tarifas puede contribuir a aliviar las presiones inflacionarias, la preocupación, tanto de la empresa como de las autoridades de gobierno, pasa por determinar con precisión cómo impactaría una rebaja de los precios en el resultado operativo proyectado por la empresa para el cierre del año.
El MEF tiene la lupa sobre la gestión de las empresas públicas y en particular de ANCAP. Su balance en 2014 fue el peor de su historia y arrojó pérdidas por US$ 324,1 millones. Parte de este perjuicio obedeció al rezago en la actualización del margen de ganancia que la empresa obtiene por la refinación y comercialización de combustibles, que ANCAP acordó con Economía corregir para que deje de impactar en sus costos operativos.
Con los números arriba de la mesa, tanto el ente petrolero como el MIEM ya dieron el visto bueno, pero ahora la última palabra está en los escritorios de la sede del MEF en la calle Colonia y Paraguay.
El ritmo con que transcurre el trámite en esta oportunidad es notoriamente más lento que en otras instancias, cuando lo que estuvo en discusión fue un aumento de precios. De hecho, en ocasiones anteriores, el decreto con las nuevas tarifas ha sido publicado inmediatamente después de conocerse los informes técnicos. Incluso la decisión de mantener los precios o ajustarlos a la baja se podría haber tomado mucho antes, si se considera que la información que se toma como base es la evolución del petróleo Brent y del dólar en el período julio – setiembre. Esa información está disponible hace 15 días.
"A nosotros formalmente no nos llegó nada. No hay ninguna propuesta de ajuste. Cuando venga, la estudiaremos y tomaremos una decisión, pero acá no llegó nada", respondió ayer el subsecretario de Economía, Pablo Ferreri ante la consulta realizada por El Observador.
Según cálculos de El Observador, tomando como referencia los costos del Brent en el mercado internacional y la evolución promedio del dólar, el precio del barril en pesos durante el pasado trimestre quedó 9,7% por debajo de la paramétrica de ANCAP. Para fijar las tarifas, el ente considera un valor del crudo de US$ 60 y un dólar a $ 27,5.
Desde fin de setiembre, las autoridades del MEF han mostrado cierta cautela respecto a una posible corrección a la baja de las tarifas. Primero fue el ministro de Economía, Danilo Astori que al ser consultado por el tema respondió que no estaba prevista en el corto plazo, aunque no descartó su concreción. Luego, el lunes 28, en el programa Entrelíneas de Canal 20 de TCC, el subsecretario Pablo Ferreri dijo que "si bien es cierto que el petróleo bajó, el dólar subió y por eso hay que ser cautelosos".
Aunque una baja de tarifas puede contribuir a aliviar las presiones inflacionarias, la preocupación, tanto de la empresa como de las autoridades de gobierno, pasa por determinar con precisión cómo impactaría una rebaja de los precios en el resultado operativo proyectado por la empresa para el cierre del año.
El MEF tiene la lupa sobre la gestión de las empresas públicas y en particular de ANCAP. Su balance en 2014 fue el peor de su historia y arrojó pérdidas por US$ 324,1 millones. Parte de este perjuicio obedeció al rezago en la actualización del margen de ganancia que la empresa obtiene por la refinación y comercialización de combustibles, que ANCAP acordó con Economía corregir para que deje de impactar en sus costos operativos.
Con los números arriba de la mesa, tanto el ente petrolero como el MIEM ya dieron el visto bueno, pero ahora la última palabra está en los escritorios de la sede del MEF en la calle Colonia y Paraguay.
