Kiev informó este miércoles que su defensa antiaérea derribó más de una veintena de misiles crucero y numerosos drones explosivos rusos en el ataque “más poderoso” contra la ciudad ucraniana desde la primavera boreal, que dejó un salde de dos muertos.
Un periodista de la agencia de noticias AFP en Kiev escuchó al menos tres explosiones alrededor de las 5, hora local como parte de una oleada de 28 misiles crucero y 16 drones explosivos.
Dos personas murieron y otra resultó herida por la caída de escombros, escribió en su cuenta de Telegram Serhiy Popko, jefe de la administración militar de Kiev.
Las tropas rusas lanzaron desde distintas direcciones “grupos” de drones de asalto iraníes Shahed contra la capital, que también fue blanco de misiles de la fuerza aérea, lanzados desde bombarderos estratégicos Tu-95 MS, según las autoridades militares.
Iryna Oblat, residente de Kiev, señaló los escombros en la calle y las ventanas rotas en los edificios circundantes. “Mira dónde golpeó, mira lo que le pasó a la casa”, le dijo a The Associated Press. Y agregó: “Los garajes están en llamas. No sabemos cuántos coches y garajes quedaron destruidos porque los bomberos y la Policía no nos dejaron entrar”.
Reporteros de AFP vieron a trabajadores municipales evaluando los daños en el techo de un edificio de viviendas con las ventanas destruidas, cuyos residentes limpiaban los escombros.
Además, Rusia aseguró haber destruido cuatro embarcaciones ucranianas con unos 50 soldados a bordo en el mar Negro y afirmó haber derribado ataques con drones ucranianos en varias partes de su territorio.
Según el Ministerio ruso de Defensa, la aviación rusa destruyó “cuatro embarcaciones militares de alta velocidad” en el mar Negro hacia la medianoche de Moscú.
Las embarcaciones transportaban “unidades de desembarco de las fuerzas de operaciones especiales ucranianas con un número total de hasta 50 personas”, agregó.
El comunicado no dio detalles sobre la parte del mar Negro en la que ocurrieron los hechos.
A primera hora del miércoles, a orillas de las mismas aguas, las defensas rusas rechazaron un “ataque de dron marítimo” cerca de la bahía de Sebastopol, en la península anexionada de Crimea, informó el gobernador local, Mijaíl Razvozháyev.
Tanto Kiev como Moscú intensificaron su actividad en el mar Negro desde que Rusia se desvinculó de un acuerdo auspiciado por la ONU y Turquía para facilitar la exportación de cereales ucranianos a través de sus aguas.
Sebastopol es la base de la flota rusa del mar Negro y la ciudad más importante de Crimea, blanco frecuente de ataques de Kiev.
Por su parte, las autoridades militares rusas informaron sobre una serie de ataques ucranianos con drones sobre territorios ocupados por Moscú. El ataque, que se realizó durante la noche, fue calificado como el mayor realizado por Ucrania en suelo ruso desde los inicios de la guerra.
Según el informe, las defensas aéreas rechazaron un ataque en el aeropuerto de Pskov (noroeste), situado a unos 800 kilómetros de Ucrania y cerca de las fronteras de Letonia y Estonia, antiguas repúblicas soviéticas ahora dentro de la Unión Europea.
El gobernador de la región, Mijaíl Vedernikov, publicó un video en redes sociales de un gran incendio con sonidos de explosiones y sirenas de fondo, aunque trascendió que fueron dañados cuatro grandes aviones de transporte Il-76.
Las autoridades estaban calibrando los daños del ataque que, según el gobernador, no dejó víctimas humanas.
Vedernikov explicó que todos los vuelos previstos el miércoles desde el aeropuerto de Pskov fueron cancelados “hasta aclarar la naturaleza de los posibles daños en la pista”.
Los aeropuertos moscovitas de Vnúkovo y Domodédovo “cerraron temporalmente” sus operaciones, afirmó la agencia local TASS, basándose en informaciones de los servicios de tráfico aéreo.
Las autoridades de otras regiones como Briansk y Oriol, cerca de Ucrania, y Kaluga y Riazán, en los alrededores de Moscú, informaron que habían destruido o abatido drones ucranianos.
El alcalde de la capital rusa también señaló que las defensas aéreas habían destruido un dron “dirigido a Moscú” que no causó daños ni víctimas, según los informes iniciales.
Hace semanas que Ucrania lanza ataques con drones contra Moscú y otras regiones de Rusia casi a diario, en un intento de llevar el conflicto al territorio rival.
Según el Ministerio de Defensa, se derribaron más drones sobre las regiones de Oryol, Bryansk, Ryazan y Kaluga, así como sobre la región que rodea la capital rusa. Tres aeropuertos principales de la región de Moscú (Sheremetyevo, Vnúkovo y Domodédovo) suspendieron temporalmente los vuelos entrantes y salientes.
En la región de Bryansk, el gobernador Alexander Bogomaz dijo que seis drones fueron derribados durante la noche. Uno de ellos dañó un edificio administrativo, dijo, provocando un breve incendio. Dos de ellos apuntaban a una torre de televisión, pero fueron derribados. Los medios rusos citaron más temprano el miércoles a residentes locales que dijeron haber escuchado una fuerte explosión.
Dos drones fueron derribados sobre la región de Oryol, dijo el gobernador Andrei Klychkov. Dos más fueron derribados en la región de Riazán y uno en la región de Moscú, dijeron las autoridades.
También el miércoles temprano, funcionarios en la anexada Crimea, informaron haber repelido un ataque de drones dirigido al puerto de la ciudad portuaria de Sebastopol.
(Con información de agencias)
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