Intercambio de reproches entre Policía y la fiscal por caso Kiki

El entrecruzamiento de reproches entre la Policía y la fiscal Diana Salvo por la forma de proceder en el intento de captura de Christian Pastorino, alias Kiki, asesino de dos mujeres, continúa. Mientras fuentes policiales dijeron que Salvo no les dio la orden de allanamiento el 11 de febrero con el argumento de que no trabajaba en Carnaval luego de que la Policía detectó una vivienda en la que se suponía estaba el Kiki, la fiscal aseguró que no estaba de turno y que por lo tanto no era ella quién debía dar la orden.

"¡Eso es mentira, una infamia y una campaña de enchastre que demuestra que la Policía tiene cola de paja!", dijo Salvo a El Observador sobre la versión de la Policía de que ella no dio la orden que le pidieron.

Al Kiki lo venía buscando la Policía desde el 9 de diciembre, día en que asesinó de cuatro balazos a su mujer Alison Pachón, de 20 años.

Para la Policía era importante que el caso lo siguiera Salvo que había estado liderando la investigación desde un comienzo. "El oficial del caso también estaba de licencia pero volvió a trabajar ante ese dato que consideraba importante", dijo una fuente ministerial.

Fue por eso que el oficial volvió a insistir con la fiscal el martes 13. La fiscal volvió a decirle que no pero acordó que la llamara al día siguiente que se la daría, contó un alto cargo de la Policía.

El miércoles 14, ya pasado Carnaval, le Policía le reiteró la orden de allanamiento pero la fiscal lo concedió como "no urgente", lo cual quedó registrado en un expediente que la Suprema Corte de Justicia divulgó públicamente, molesta por afirmaciones de Salvo, que había cuestionado el accionar de la investigación en general y de la Policía en particular.

"Yo no estaba de turno, y si la Policía estaba apurada podía pedir el allanamiento al fiscal de turno. Luego, cuando me reintegré el miércoles, lo pedí sin urgencia porque tampoco me dijeron que la solicitud era urgente, y yo sabía que estos pedidos tardan, por lo menos, un día entero", dijo Salvo a El Observador.

La Corte estableció en su comunicado: "En relación a trascendidos de prensa sobre dichos de la Fiscal Letrado Penal deMontevideo, Dra. Diana Salvo, referidos a inconvenientes en los procedimientos de allanamiento en la búsqueda de Christian Pastorino por el homicidio de Alison Pachón, los registros de la tramitación de dichas actuaciones en la OPEC evidencian su diligenciamiento en tiempo y forma. En el caso específico de las órdenes deallanamiento, todas se resolvieron de forma inmediata, no obstante fueron solicitadas como procedimientos a realizarse al día siguiente, no urgente".

Al no haberse pedido con urgencia el allanamiento tuvo que hacerse el 15. Para entonces no se halló a nadie en la casa.

Según la Policía, se le pidió a Salvo una interceptación telefónica a la cuñada del Kiki porque se supo que estaba ayudando al delincuente a escapar y la fiscal no dio la autorización. En un extenso informe de más de 200 páginas que la Dirección Nacional de Policía pidió a los investigadores ante los cuestionamientos que Salvo hizo a la investigación, y al que accedió El Observador, figura este pedido de interceptación telefónica fechado el 7 de febrero (ver foto). Y consta que la fiscal no le dio curso.

La fiscal aseguró que tiene las copias de las solicitudes para realizar las escuchas. Agregó que se interceptaron las comunicaciones del delincuente, pero que no fueron determinantes para capturarlo, puesto que gran parte de las conversaciones se realizaban a través de WhatsApp.

Tres días después del allanamiento fallido el Kiki asesinó a la cajera del supermercado.

Los roces entre la fiscal y la Policía se mantuvieron cuando luego del asesinato de la cajera del supermercado, Salvo expresó su "frustración" por esa muerte, señaló que había librado cinco órdenes de allanamiento que no dieron resultado y sentenció que era "rarísimo" que la Policía no pudiera atrapar a Kiki, un delincuente que se movía en un ambiente reducido. Las declaraciones de la fiscal motivaron una investigación interna en la Policía.