Javier García: "Se vendió el avión presidencial por el precio de dos camillas"

"Hemos terminado con éxito un proceso que va a significar un ahorro muy importante al país, que está inscripto dentro de nuestra política de austeridad", dijo el secretario de Estado en conferencia de prensa. Ante los periodistas, recordó que junto con la compra del avión había sido necesaria la adquisición de una camilla especial para trasladar a heridos –ya se suponía que la aeronave iba a servir para hacer traslados médicos–, y que esa compra se ejecutó por la mitad del precio por el que se vendió ahora el Hawker Siddeley.

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"Fíjense ustedes cómo habrá sido la compra en ese momento que se llegó a comprar una camilla para este avión en US$ 90.000. Es decir que hoy se vendió en el precio de dos camillas", dijo García. Y agregó que, en total, sumando el precio de la adquisición del avión y los gastos de mantenimiento, el Estado gastó en dos años y medio casi US$ 3 millones. Por lo que, según el ministro, la subasta terminó con "un drenaje millonario", y que el precio que se pactó en el remate fue el que marcó "el mercado".

"El precio no es ni alto ni bajo. El problema no es el precio en que se vendió, sino el precio por el que se compró", señaló. En ese sentido, el ministro dijo que la decisión del gobierno de Vázquez de comprar el avión al empresario Carlos Bustin, exdueño de Autolider y representante de Mercedes Benz en Uruguay, fue motivada por "el amiguismo" "Iba con nombre propio la compra de este avión, todos los sabemos", acusó García.

Aquella compra fue objeto de una intensa discusión política y de observaciones del Tribunal de Cuentas (TCR) porque, según entendía el departamento de Jurídica del organismo, el proceso licitatorio no fue competitivo.

"Fíjense bien la diferencia –subrayó–. Hoy subastamos en forma pública y transparente lo que se compró en forma directa y con sobreprecio".

García dijo por último que los US$ 180.000 que recibirá el MDN serán destinados a la Fuerza Aérea, y que la camilla será usada en otro avión para continuar haciendo los traslados médicos.

Según informó Radio Universal, el hombre que se quedó con el Hawker es un empresario argentino que vive en Uruguay desde hace varios años, y que ha invertido en Colonia en el rubro hotelero. Por eso, el avión quedará en Uruguay para uso personal del comprador.