El exbanquero José Peirano Basso será extraditado a Paraguay, luego de que la Suprema Corte de Justicia (SCJ) rechazara un recurso de casación presentado por la defensa del empresario en contra de la medida, informó El País y confirmó El Observador.
Peirano Basso era requerido tanto en Argentina como en Paraguay por diversos delitos cometidos en ambos países. En Paraguay es investigado por delitos de lesión de confianza y conducta indebida en situaciones de crisis a raíz de la desaparición de depósitos de clientes del Banco Alemán. En Argentina los cargos son la coautoría del delito de defraudación por administración fraudulenta, vinculado al Grupo Velox.
En Uruguay el exbanquero estuvo preso del 2002 al 2007 y recién fue condenado en 2013 por insolvencia societaria fraudulenta en la quiebra del Banco de Montevideo. No regresó a la cárcel por ya haber cumplido la pena en forma anticipada. Estuvo recluido en Cárcel Central.
En noviembre de 2021 la justicia dio prioridad al pedido de extradición de Paraguay en primera instancia y luego en un Tribunal de Apelaciones, debido a que los delitos perseguidos por ese país conllevan penas mayores a las de Argentina. Sin embargo, el abogado Pablo Donnángelo interpuso un recurso de casación a la medida al entender que el cargo más grave era el que se perseguía en Argentina.
Sin embargo, este 27 de abril la Suprema Corte falló por tres votos a dos en contra del recurso y sostuvo la extradición de Peirano Basso a Paraguay. "El recurso de casación interpuesto es claramente inadmisible, y solo lo explica el inocultable propósito de demorar y/o diseccionar el acto material de la propia entrega", indica la sentencia judicial a la que accedió El Observador.
Además, desde la Corte indicaron que actualmente "la única solicitud de extradición que se encuentra vigente es la de la República de Paraguay", ya que recibieron una comunicación oficial del Poder Judicial de la Nación Argentina en la que se informa que se deja "sin efecto" el pedido de extradición realizado por el país vecino.
"Ante la falta de solicitudes concurrentes, la presente controversia para determinar la preferencia en la extradición carece de objeto", concordaron los ministros Alberto Reyes, Doris Morales y Elena Martínez, quienes se opusieron a la casación.
Los ministros John Pérez Brignani y Tabaré Sosa discordaron con la versión mayoritaria de la SCJ. La principal diferencia se basó en que Reyes, Morales y Martínez entienden que la decisión recurrida "no es una sentencia definitiva de segunda instancia, y tampoco una interlocutoria con fuerza de definitiva que impida continuar el proceso, sino que es una sentencia interlocutoria simple y, como tal, no es pasible de ser impugnada mediante el recurso de casación".
Para Pérez y Sosa, por otra parte, la sentencia interlocutoria implica la clausura del proceso judicial contra Peirano Basso, por lo que entienden que la Suprema Corte debía aceptar el recurso de casación.
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