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La estrategia detrás de un asalto que terminó con el locutor Mauricio Arnejo muerto
La Justicia imputó este jueves a los autores materiales del homicidio del locutor radial de Nueva Helvecia, Mauricio Arnejo, asesinado en la distribuidora en la que trabajaba el pasado 10 de junio. Además, dos mujeres fueron imputadas por encubrimiento.
Uno de los hombres fue detenido en Montevideo, y el otro estaba en prisión en el Comcar, según se detalla en la solicitud de formalización de Fiscalía.
El 10 de junio, los dos hombres con pasamontañas, guantes negros y armas de fuego, ingresaron a la distribuidora de productos lácteos alrededor de las 19:30 horas y exigieron al dueño de la empresa que colocara la recaudación adentro de una bolsa negra. El hombre empezó a forcejear con uno de los delincuentes y el otro le disparó en ambas piernas.
El herido gritó pidiendo auxilio y el delincuente que lo enfrentó salió del lugar y le disparó a Arnejo, que murió en el momento. Mientras tanto, el otro hombre guardó el dinero –aproximadamente $ 100 mil– en la bolsa y huyeron en un auto. Otros $ 800 mil quedaron en un cajón del escritorio.
Un testigo que declaró por el caso confirmó que una hora antes del crimen llegó a la empresa y le entregó el dinero de la recaudación del día al dueño de la distribuidora. Otro empleado comentó que generalmente los miércoles –día del homicidio– es cuando más recaudan efectivo los distribuidores porque van a Montevideo y regresan con cerca de $ 500 mil, por lo que se presume que los delincuentes conocían los movimientos de la empresa y cuál era el día en que podrían encontrar más dinero.
De la investigación surge que el vehículo en el que se trasladaron los homicidas fue robado el día anterior, pasó por el peaje de la Barra de Santa Lucía, ingresó a la ciudad de Nueva Helvecia el día del crimen, y fue estacionado en la casa de un cómplice, imputado en junio por este caso. En el lugar, también estaba la camioneta de otro hombre que fue a prisión por el homicidio.
Ninguno admitió en ese entonces su participación en el crimen.
Los cuatro hombres pasaron dos veces enfrente a la distribuidora para planificar los detalles del robo, según surge de las conversaciones telefónicas entre ellos. Después del homicidio, prendieron fuego el auto robado.
La fiscal, Sandra Fleitas, que lideró la investigación, presentó pruebas que indican que los autores del crimen imputados este jueves llegaron a Nueva Helvecia y estuvieron en la casa de uno de los delincuentes imputado en junio por el caso, y en la noche, luego del crimen, regresaron a Montevideo.
Luego de la formalización de la investigación y con los delincuentes presos, tras allanamientos a viviendas en la capital, se incautaron celulares y municiones, y de las pericias a los teléfonos se pudo determinar que el coautor del homicidio dijo que tenía una deuda con los dos imputados, que estaban presos por el crimen de Carnejo, y se comprometió a pagar $ 1.000 por semana a cada uno.
A partir del relevamiento de cámaras de videovigilancia, conversaciones en redes sociales y telefónicas, la fiscalía comprobó que los dos imputados este jueves eran amigos, que antes y después del homicidio se comunicaban diariamente hablando sobre los delitos, seguían la investigación a través de medios de prensa y acordaron que el homicida iría a buscar las armas con las que se cometieron los delitos.
Sus parejas los encubrieron, aportando chips de celulares y creando coartadas para evitar que los vincularan con el caso.
Los autores del homicidio fueron imputados por un delito de asociación para delinquir, con un delito de homicidio especialmente agravado y otro de lesiones personales especialmente agravado, en calidad de autores, y permanecerán 120 días en prisión preventiva, mientras continúa la investigación.
En tanto, sus parejas fueron imputadas como presuntas autoras de un delito de asociación para delinquir, con un delito de encubrimiento, y la fiscal pidió como medida cautelar la prisión domiciliaria nocturna, que fue adjudicada durante 120 días.
